“Cada uno tiene que afrontar sus debilidades con hombría y saber reconocer cuando comete un error. No ocultamos nada”, dijo el cardenal Cipriani, citado en el comunicado del arzobispado.
“La Iglesia respeta y respetará a la justicia civil, a los procesos judiciales en marcha. Tolerancia cero con todos estos temas. Mi solidaridad con la honra de las personas perjudicadas en especial con esta niña inocente, que debe ser reconocida por su padre”, señaló el cardenal según la misma nota.
El Tercer Juzgado de Paz Letrado del distrito limeño de Surco, emitió el 15 de julio un mandato de apercibimiento para que el obispo emérito castrense Guillermo Abanto, de 49 años, reconozca a una niña de 2 años.
Según informaciones de prensa, el obispo Abanto Guzmán se encuentra “no habido” y no ha dado respuesta a la demanda de paternidad ni a someterse a la prueba de ADN que ordenó el juzgado de Paz Letrado.