“Ha sido necesario fijar unos límites para la inspección. Si hay más de dos moscas, el baño público perderá 1,33 puntos de un total de 100 puntos. Hasta ahora, la mayoría de los inspeccionados no superan esa cantidad, solamente los mal administrados”, dijo Xin.
Para cumplir con la medida, los empleados de la limpieza deberán emplear diversos sistemas para acabar con las moscas, ya sean aparatos eléctricos, tiras de goma en las que se peguen o insecticidas, añadió Xin, quien destacó que en cada baño existe un número de teléfono para poner denuncias.
“Pero, ¿quién va a detenerse en un baño público para denunciar que hay una mosca de más?. Es un lugar del que se quiere salir rápidamente”, dijo un recién graduada universitaria, que no quiso identificarse, y que comparte un baño público con el resto de los habitantes de su “hutong” (callejón).
En los foros de internet la polémica es amplia, no solo de higiene, y por ejemplo, en Weibo (Twiter chino), Jing Lihong, afirmó que “mientras se mejora la higiene de los baños, los obreros que los reparan y limpian, efectúan el oficio más despreciable por un salario mínimo y expuestos a la contaminación de los gases”.
“¿Por qué los dirigentes no se fijan en sus condiciones laborales y las mejoran?”, destacó Jing.
Sun Yun por su parte se pregunto: “Si en una vivienda hay más de dos moscas, entonces es peor que un baño público”.
Para Lin Jie, “¿por qué fijarse en las moscas cuando hay tantos tipos de insectos en lugares no muy limpios?”.
“Al menos el Gobierno hace otra cosa útil para la gente, que debe apreciarlo. Si hace muchas, se sentirá agradecida”, dijo Sui Jianfeng.
Entre las recomendaciones de la Oficina para la higiene de los baños públicos se encuentra también la de impulsar la utilización de la cisterna y a vaciar más a menudo las papeleras.