Byrne asistió solamente dos semanas a la universidad en el este de Londres. En un inicio se preparaba para estudiar psicología, igual que sus padres. Pero la vanidad pudo más.
Luego de ser beneficiada con una beca estudiantil, cuando apenas tenía 22 años, decidió utilizar ese dinero para operarse los senos.
“Al principio me impresioné. Apliqué a una beca estudiantil y luego de unos días recibí una carta que decía que había sido aprobada y recibiría el dinero”, dijo la modelo al diario The Sun
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Tras recibir US$21 mil 500 de la beca, Byrne se sometió a una cirugia de senos y así logró pasar de una copa B hacia una D. “Yo ya sabía en qué me iba a gastar el dinero”, agregó.
Mientras su compañeros de clase gastaban el dinero en libros, ella pensaba en los posibles trabajos que podía aplicar con su nueva figura.
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“Mis nuevos senos me hacen sentir mil veces mejor. Ahora me siento más segura de mí misma y fue la mejor inversión que pude haber hecho. Es mejor invertir dinero en el cuerpo que en el cerebro”, dijo la joven.
Byrne utilizó el dinero que sobró para inyecciones de bótox y colágeno para mejorar su rostro.
Ahora la modelo trabaja en la industria de películas para adultos y comparte en su red social Twitter fotografías de sus nuevos proyectos y los lugares que visita.
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