IMAGEN ES PERCEPCIÓN
67º aniversario de Radio Cultural
El 6 de agosto de 1950 se transmitió por primera vez un programa en Radio Cultural TGN, una emisora que ha estado al servicio del pueblo de Guatemala, como la primera radio encargada de difundir la palabra de Dios, cultura y educación en el país. Con sus programas ha contribuido por décadas al desarrollo de la evangelización de muchos guatemaltecos.
Esta emisora no lucrativa que hasta el día de hoy se ha mantenido milagrosamente por 67 años, está dentro de las frecuencias guatemaltecas con más audiencia a nivel nacional.
Como parte de los actos que esta radio organizó para celebrar su aniversario, fui invitada a una conferencia impartida por el evangelista mexicano Dr. Armando Alucín. Para mí siempre es un placer escuchar sobre temas escatológicos, porque por años me he dado a la tarea de estudiar sobre esta materia. El Dr. Alducín presentó un panorama geopolítico bien documentado, sobre lo que está ocurriendo en el mundo y cómo coincide con lo descrito en los libros proféticos bíblicos.
Debemos aprender que cada hecho que ocurre en el mundo nos afecta como país y sociedad, dentro del conglomerado de naciones que conforman la aldea global, es importante ir uniendo las piezas de un gran rompecabezas que nos hará tener un panorama general y entender nuestro papel individual como seres humanos y espirituales.
Hoy en día, pareciera que “lo bueno es malo y lo malo es bueno”. Corrupción, pobreza, injusticias sociales, una total pérdida de valores, desastres naturales y cuanta barbaridad más. ¡Ese es nuestro mundo de hoy!
Para muchos teólogos el fin del mundo está muy cerca, todas las profecías ya se han cumplido y estamos en un momento crucial de la historia del ser humano. La pregunta no es cuándo pasarán estos acontecimientos, sino: ¿Está usted preparado para ese día?
Nadie sabe el día y la hora, pero las señales anunciadas por el mismo Jesús ya son visibles en la tierra y el cielo. Allí surge la necesidad de establecer una cosmovisión de la razón por la cual existe el ser humano. Por supuesto que no le estoy hablando de pertenecer a una religión o practicar ciertos ritos, sino de una búsqueda espiritual que le ayude a encontrar respuestas.
Respecto de los creyentes, cada uno se adscribe a un sistema religioso de verdades dogmáticas, creyéndose poseedor de verdades absolutas, fuera de la cual impera el reino del pecado, oscuridad y del mal. El problema de los dogmas religiosos es que no todos coinciden en que habrá un juicio final y difieren en los requisitos de la salvación del hombre, basada en obras o por gracia.
Algunos se aferran a una religión, poniendo su fe en un pastor o sacerdote, que son hombres y también se pueden equivocar. Respecto de los ateos, querrán vivir el momento, pensando que el mundo jamás se acabará, aduciendo que son leyendas urbanas para mantener controladas a las masas. Lo malo es que si se equivocan y Dios sí existía, tendrán que pagar un alto costo en la eternidad.
El fin del mundo puede ser mañana, o en diez años, nadie sabe cuándo, pero lo que sí es cierto es que el fin del mundo para cada quien llega el día de su propia muerte, y ese día llegará para todos, sin excepción de credo, sexo o clase social. Por tanto, el deber de cada ser humano en este mundo es estar preparados, buscar una verdad que trasciende a religiones o personas, investigando la razón de nuestra propia existencia y procurando una relación directa con Dios, porque un día todos daremos cuenta de nuestras propias decisiones en este mundo. El tiempo se agota y vivir una vida justa es lo que, sin importar religión o credo, deberíamos practicar. Amar a Dios y al prójimo, como si hoy fuera el último día de nuestra vida terrenal.