Pluma invitada
Claves para entornos laborales exitosos en 2025
Un enfoque en el aprendizaje continuo ayuda a los equipos de trabajo a desarrollar una mentalidad de crecimiento.
Un entorno laboral que valora la curiosidad y el aprendizaje continuo también fomenta una mayor participación y compromiso de las y los colaboradores.
Hoy, la capacidad de adaptarse y evolucionar es crucial. Según el reporte “The Future of Jobs 2023” del Foro Económico Mundial, habilidades como la curiosidad y el aprendizaje continuo se perfilan como fundamentales para el éxito profesional y la creación de entornos laborales innovadores y resilientes hacia 2025.
Estas competencias no solo potencian el desarrollo individual, sino que también son esenciales para que las organizaciones mantengan una ventaja competitiva en un mercado complejo y tecnológicamente disruptivo.
La curiosidad, entendida como el deseo innato de aprender, explorar y entender lo desconocido, es una habilidad que impulsa el descubrimiento y la innovación. En el contexto laboral, una cultura que fomenta la curiosidad incentiva a las y los colaboradores a cuestionar el statu quo, a buscar soluciones innovadoras y a asumir riesgos calculados. Este ambiente de exploración constante, además de mejorar la resolución de problemas, también impulsa la creatividad y la innovación. Las empresas que valoran y promueven la curiosidad entre sus empleados están mejor posicionadas para identificar y capitalizar nuevas oportunidades de mercado, así como para adaptarse a los cambios disruptivos que caracterizan la economía moderna.
Mientras que las máquinas pueden realizar tareas repetitivas y basadas en reglas de manera más eficiente, las habilidades humanas como la curiosidad y la capacidad de aprendizaje continuo son irremplazables.
El aprendizaje continuo, por otro lado, es la habilidad de adquirir y aplicar conocimientos y habilidades de manera constante a lo largo de la vida profesional. Este enfoque es fundamental en un entorno donde las tecnologías y los procesos evolucionan rápidamente. La rápida obsolescencia de habilidades hace que la capacidad de aprender de manera continua sea una necesidad, pero no solamente para mantenerse al día con los avances tecnológicos; adicionalmente, para anticipar y adaptarse a los cambios en las dinámicas del mercado y en las demandas del cliente. Las organizaciones que promueven el aprendizaje continuo entre sus colaboradores invierten en el desarrollo de su capital humano, lo que en consecuencia les da una mayor preparación para enfrentar desafíos futuros.
Un entorno laboral que valora la curiosidad y el aprendizaje continuo también fomenta una mayor participación y compromiso de las y los colaboradores. Las y los trabajadores que sienten que sus habilidades y conocimientos son valorados y que tienen oportunidades para aprender y crecer son más propensos a estar comprometidos con su trabajo y con la organización. Este compromiso se traduce en una mayor productividad, una menor rotación de personal y, más importante, en un mejor desempeño organizacional. Además, un enfoque en el aprendizaje continuo ayuda a los equipos de trabajo a desarrollar una mentalidad de crecimiento, capacitándolos para ver los desafíos como oportunidades de aprendizaje y desarrollo personal.
“The Future of Jobs 2023” subraya la importancia de estas habilidades en un contexto donde la automatización y la inteligencia artificial están transformando la naturaleza del trabajo. Mientras que las máquinas pueden realizar tareas repetitivas y basadas en reglas de manera más eficiente, las habilidades humanas como la curiosidad y la capacidad de aprendizaje continuo son irremplazables. Estas habilidades permiten a los individuos y organizaciones por igual innovar, resolver problemas complejos y adaptarse a nuevas circunstancias, todas ellas competencias esenciales en la economía digital.
Para las y los líderes empresariales, fomentar un ambiente que valore estas habilidades implica invertir en programas de desarrollo profesional y en una cultura organizacional que valore la experimentación y el aprendizaje. Esto contempla desde la oferta de capacitación continua y oportunidades de educación, hasta la creación de espacios para explorar e innovar. Al hacerlo, las empresas desarrollan un equipo de trabajo más competente y adaptable, posicionándose como entornos laborales atractivos en un mercado cada vez más competitivo.
* Doctora en Relaciones Internacionales
Red Forbes