PLUMA INVITADA
Jóvenes transformando el mundo
Guatemala tiene la población joven más grande de toda América Latina y el Caribe. El 61% es menor de 30 años y la edad promedio es de 22.9 años. Es decir, que un tercio de la población tiene entre 12 y 29 años, lo que significa que alrededor de 6 millones de guatemaltecos son jóvenes.
' Cuando la juventud se empodera puede manejar la transformación en sus comunidades y en sus países.
Stefanie Hartleben
Estas cifras retratan el bono demográfico que caracteriza a nuestro país y que representa una gran oportunidad para su crecimiento y desarrollo económico y social. Los jóvenes son los actores del futuro, son pensadores, críticos, emprendedores y los próximos líderes empresariales que desempeñan un papel fundamental y liderarán el cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS).
Los ODS son el camino para un futuro mejor y más sostenible, incluyen 17 objetivos y 169 metas que nos señalan una ruta prioritaria para lograr un desarrollo integral. No hay un ODS exclusivo para la juventud, la juventud está en todos ellos.
Para darle cumplimiento a estas ambiciosas metas, el rol del sector privado se está volviendo cada vez más importante. Está trabajando en colaboración con organismos internacionales, gobiernos y sociedad civil para alinear sus prácticas e inversiones con los ODS. Un claro ejemplo de esto es el Pacto Global de las Naciones Unidas, la iniciativa de sostenibilidad más grande del mundo que trabaja para alcanzarlos, reuniendo empresas, sociedad civil y universidades.
En ese marco, Pacto Global Red Guatemala, junto a la Fundación Ciudades Conectadas desarrollaron un proyecto llamado ODS.GT, con la visión de promover y concientizar a la ciudadanía guatemalteca sobre la importancia de lograr estos objetivos y motivarla a formar parte del cambio.
Este tipo de iniciativas son necesarias para empoderar a la juventud, para formar a las nuevas generaciones de gerentes generales, financieros, dueños de negocios, inversionistas, administradores y emprendedores. Y para animar a esa generación con ganas de cambiar las cosas —a quienes no solo les importa su futuro sino el futuro de sus hijas e hijos— a velar por la humanidad y el planeta.
Cuando la juventud se empodera puede manejar la transformación en sus comunidades y en sus países, convirtiéndose en líderes para ser agentes de cambio. Su imaginación, ideales, y su energía son claves y vitales para el desarrollo económico y social de toda sociedad. Es por eso que tienen un rol muy importante para la construcción de la Guatemala que queremos. Crear un impacto positivo para el país está a nuestro alcance. Lo que se necesita es un cambio de mentalidad en el que los jóvenes juegan, cada vez más, un rol muy importante.
En el mundo que vamos a heredar, la juventud es sin duda el agente de cambio y del futuro. Jóvenes que entienden los desafíos actuales y pueden aportar ideas nuevas e innovadoras y soluciones alternativas. Se necesita de su energía y capacidad de comunicación para correr la voz de las metas que necesitamos alcanzar en Guatemala, permitiendo avanzar más aceleradamente en conseguir estos objetivos.