ESCENARIO DE VIDA
Los refugiados climáticos
Les escribo en esta oportunidad sobre el cambio climático y las migraciones de centroamericanos que huyen en caravanas para buscar refugio en los Estados Unidos. Conecto los dos temas porque están fuertemente interrelacionados. Es lamentable cómo los medios estadounidenses difunden noticias perniciosas sin realmente entender por qué miles de inmigrantes están cruzando la frontera. Para comprender a fondo las razones de la odisea tenemos que abordar los Objetivos del Milenio (ODM) y ver si Guatemala los está cumpliendo.
' Deben implementar más programas de desarrollo a través de Usaid, en vez de eliminarlos o recortarlos.
Vida Amor de Paz
Objetivo 1 es erradicar la pobreza extrema y el hambre, Objetivo 2 es lograr la enseñanza primaria universal, el Objetivo 3 es promover la igualdad entre los géneros y la autonomía de la mujer, el Objetivo 4 es reducir la mortalidad infantil, el Objetivo 5 es mejorar la salud materna, el Objetivo 6 es combatir el VIH/sida, el paludismo y otras enfermedades, el Objetivo 7 es garantizar la sostenibilidad del medio ambiente, y el Objetivo 8 es fomentar una asociación mundial para el desarrollo.
Si queremos ofrecer prosperidad y una buena calidad de vida para los ciudadanos, Guatemala debiera estar cumpliendo con los ODM. La triste historia es que no lo está, pues del 2005 al 2015 no alcanzamos ni un solo objetivo. Esto me parece verdaderamente lamentable y ahora nos toca analizar por qué no lo hemos logrado.
Hasta el momento, el Estado ha expresado solo buenos deseos y ninguna solución real para enfrentar los desafíos, pues no ha tomado las acciones necesarias. Si el Gobierno no sabe satisfacer las demandas de la población, nuestro atraso será cada vez más notorio e irá surgiendo mayor pobreza, inseguridad alimentaria, falta de educación y salud, y un incremento a la inseguridad y violencia.
La pobreza aumentó al 59.3 por ciento y el 23.4 por ciento de la población vive en la pobreza extrema. Alrededor de 2 millones de guatemaltecos están en riesgo de hambruna crónica. La mitad de los niños (49.8%) se encuentran en situación de desnutrición crónica. Se estima que cuatro millones de niños y jóvenes en edad escolar no asisten a la escuela y más del 40 por ciento de la población no tiene acceso a agua potable. Por ello no nos extrañemos de que más de 2 millones de guatemaltecos vivan en el extranjero.
El cambio climático que ocasiona grandes sequías ha dejado a miles de agricultores sin buenas cosechas. Otros huyen de la violencia, las extorsiones, o de los traficantes de drogas que están invadiendo nuestro territorio. Aunque creo que Estados Unidos no tiene por qué tener fronteras abiertas, lo que estamos viendo aquí es gente que escapa del hambre extrema: son refugiados climáticos. ¿Soluciones?
Las caravanas de inmigrantes le han dado un verdadero dolor de cabeza al presidente estadounidense. Bien harían sus asesores en recomendarle implementar más programas de desarrollo a través de Usaid, en vez de eliminarlos o recortarlos. En vez de construir muros necesitamos crear puentes. Hablo de ayuda con programas, planes, proyectos, talleres, e innovaciones adicionales para quienes han quedado a la deriva. Solo así se reducirán las migraciones hacia su país. Hoy por hoy, nuestros connacionales salen de Guatemala con el corazón en un puño, descorazonados al dejar atrás a sus familias, sus costumbres y su calor chapín.
A mí no me tienen que contar el problema. Con mis viajes de filmación al interior me doy cuenta de la tremenda hambruna que hay: personas en regiones de oriente comiendo solamente 2 tortillas con sal al día. Son las sequías las que están causado hambre, muerte y más pobreza que nunca. Ellos son los “refugiados climáticos”. Con más ayuda, no habrá necesidad de un muro.