META HUMANOS
No midas tu progreso con la regla de alguien más
Hay una frase que dice: “No debes medir tu progreso con la regla de alguien más”. Es una frase que he leído muchas veces y que he olvidado muchas veces. El día menos pensado me encuentro pensando que la grama siempre se ve más verde del otro lado.
¿Alguna vez te ha pasado que ves a alguien que está logrando eso que tú también sueñas con lograr algún día y empiezas a compararte, empiezas a dudar, empiezas a sentirte atrás, y en vez de sentirte inspirado por esta persona, te sientes desmotivado y frustrado?
A mí me ha pasado. Me aventuré a seguir mi sueño y estudiar Diseño Gráfico, una carrera que tenía en mente desde pequeña. Aunque inicié mi ciclo escolar con el mejor de los entusiasmos, cuando empecé a notar los avances de mis compañeros me empecé a desmotivar, empecé a dudar sobre mis habilidades y, peor aún, me empecé a comparar.
Al empezar a toparme con obstáculos y retos en mi proceso creativo, me empecé a frustrar y pensar que no era capaz de crear lo que tenía en mente para mis proyectos. Entré en un estado mental muy negativo y dejé que el volumen de esa vocecita interna que nos habla desde el miedo se subiera y no me dejara escuchar nada más.
Esa vocecita me decía que todos los demás eran capaces y tenían potencial, pero yo no; me decía que para todos era muy fácil y simple realizar sus proyectos y que solo a mí me costaba tanto. Esa vocecita me decía que era mejor esconderme y aislarme, porque si compartía que estaba teniendo dificultades, iba a parecer débil ante los demás.
Si tú también reconoces esta vocecita interna en ti, ¡por favor, no le hagas caso! Recuerda que muchas veces nuestros pensamientos son solo eso: pensamientos. La mente es muy propensa a jugárnosla así, especialmente cuando le abrimos la puerta a la comparación.
' Tenemos el poder de reinventarnos cada día, de paso a paso ir construyendo una mejor versión de nosotros mismos.
Sarah Letona
Lo que yo no sabía en esos momentos era que eso con lo que yo me estaba comparando, “esa idea de perfección”, en realidad no existía. Al ver a los demás, en realidad solo estaba notando la punta del iceberg. No notaba que debajo del agua, debajo de cada proyecto, había trabajo duro y esfuerzo, pero también miedo e inseguridades.
Una vez que dejé de ver solamente para adentro y empecé a ver a mi alrededor, me di cuenta de que mis compañeros también se frustran, se estresan, se duermen tarde trabajando y también dudan de ellos mismos a veces. Me di cuenta de que esa voz de la duda por momentos nos habla a todos.
Entonces decidí que en vez de compararme y pensar que debo estar a cierto nivel o como alguien más, voy a compararme solamente conmigo misma, con mi yo de ayer. Quiero dar lo mejor a mi ritmo, porque la realidad es que nadie se está fijando tanto en mí como yo, ¡y nadie se está fijando tanto en ti como tú!
Así que toma TU regla y mide tu progreso con ella, porque si lo intentas medir con la regla de alguien más, no te va a funcionar porque tenemos unidades de medida diferentes. Te propongo que disfrutemos, que vamos de camino a dónde queremos llegar. Te lo repito, disfrutemos que vamos de camino a donde queremos llegar.
Cada uno de nosotros tenemos el poder de reinventarnos cada día, de paso a paso ir construyendo una mejor versión de nosotros mismos y que no tenemos límites. Escucha la voz que recuerda lo emocionante que es sentir que cada día estás más cerca de ser una versión más alta de ti. De eso se trata la vida, de un MetaHumano, de evolucionar juntos, cada quien, a su ritmo, pero todos disfrutando el camino de la vida.