DESDE GINEBRA
Organización Mundial del Comercio en el 2021
La Organización Mundial del Comercio (OMC) ha desempeñado un papel crucial en la regulación del comercio mundial. Con el aumento de las tensiones comerciales entre las naciones, y con algunos miembros que piden la reforma del organismo, vale la pena analizar por qué la OMC es actualmente una parte importante de los negocios internacionales.
' Los acuerdos resultantes son vinculantes legalmente para todos los países, incluidos los más poderosos
Eduardo Sperisen-Yurt
La OMC surgió en 1995 para fusionarse a otra organización internacional llamada el Acuerdo General sobre Aranceles Aduaneros y Comercio (Gatt), que se formó en 1948 entre 23 países, con el objetivo de reducir los aranceles aduaneros y crear una plataforma justa para todos sus miembros.
Con la fusión del Gatt a la OMC, su ámbito de aplicación es mucho más amplio. El Gatt, en su momento, reguló el comercio de mercancías, mientras que la OMC se ocupa también del comercio sobre la agricultura, los servicios como las telecomunicaciones, así como otras cuestiones como los derechos de propiedad intelectual.
Recientemente, mucho se escucha de que la OMC está en dificultades. Sin embargo, si hay personas que en algún momento piensan que el comercio mundial sería mas fácil sin el liderazgo de la OMC, están muy equivocadas, por que pondría a los gobiernos y a las empresas en grandes problemas.
Los gobiernos y los empresarios tienden a olvidar lo mucho que el régimen comercial mundial ha aportado para los países a las operaciones diarias del comercio exterior que han existido durante tanto tiempo, las empresas y los consumidores lo dan por sentado y ya ni siquiera se dan cuenta de cómo ha cambiado el comercio, facilitándolo con normas estables y sólidas negociadas por los miembros.
En este momento, todos sus miembros están limitados en lo que pueden hacer con los aranceles. Anteriormente los miembros podían alzar los aranceles de la noche a la mañana, usualmente para proteger la producción local.
Ahora, la OMC impide que los países bloqueen las mercancías para que no crucen las fronteras con reglamentaciones hechas a capricho. Los obstáculos a los productos deben basarse en pruebas científicas específicas que muestran fundamentos claros para las restricciones al comercio transfronterizo.
Naturalmente, el sistema no es perfecto. Las normas comerciales datan, en muchos casos, de la época pos Segunda Guerra Mundial y deben actualizarse al siglo 21. Pocos son los que se han actualizado desde mediados de la década de 1990, debido a que las rondas de negociaciones comerciales han sido notoriamente lentas y difíciles de alcanzar un acuerdo consensuado multilateralmente por todos sus miembros.
La OMC funciona como los cimientos de un edificio, los acuerdos comerciales necesitan construirse sobre cimientos sólidos para que sean sostenibles y que no se derrumben.
La OMC ha hecho importantes contribuciones a los progresos alcanzados en todo el mundo para promover el comercio mundial. Esto ha dado lugar al crecimiento de varias economías y a la aparición de nuevos mercados, factores importantes no solo para mejorar los negocios, sino también para sacar a la gente de la pobreza.
Lo cierto es que, si la OMC de repente desapareciera, se tendría que establecer de nuevo, ya que los gobiernos, los empresarios y los consumidores descubrirían, para su gran pesar, que realmente necesitan de un sistema comercial mundial, para aplicar reglas estables y mecanismos para dirimir sus diferencias, ya que los acuerdos resultantes son vinculantes legalmente para todos los países, incluidos los más poderosos, que tienen que jugar según las reglas, donde el imperio de la ley reemplaza al derecho de la fuerza.