SI ME PERMITE
Parálisis a cualquier nivel puede ser mortal
“Mi discapacidad ha abierto mis ojos para ver mis verdaderas habilidades”. Robert M. Hensel
Entendiendo a la parálisis como una discapacidad para poder desenvolverse, o bien poder desempeñar algunas funciones específicas; no siempre limita en su totalidad a las personas, sino más bien estas se esfuerzan desarrollando otros medios para no tener que ser siempre dependientes de otros. Ellas usan su iniciativa, lo que determina hasta qué punto pueden valerse por sí mismas.
' Uno persiste en lo planificado cuando está claro en que es el camino correcto para llegar a la meta.
Samuel Berberián
Lamentablemente, muchas personas que están sanas y pueden valerse por sus propios medios porque no tienen ninguna limitante física carecen de una iniciativa para poder ver las oportunidades de la vida e involucrarse por sus propios medios en las capacidades que tienen y que pueden mejorar para ser expertos en un área de la vida productiva; por el contrario, terminan siendo dependientes, y esto bien se puede decir que es un modo más de parálisis, que si bien no es muy evidente al principio, con el tiempo se nota y afecta incluso a los que viven con esta persona.
Nadie está negando que uno en todo inicio está dependiendo de otros, ya sea para aprender o bien para conocer cómo se hacen las cosas, pero tan pronto se asimila, la persona progresivamente se va independizando y seguramente agradeciendo y reconociendo que en un inicio fue ayudada, pero ahora es independiente.
Es muy sorprendente que en la convivencia e interacción que tenemos en la vida uno siempre puede motivar a los que están en acción, y cuando esta acción está usada correctamente, el alcance del que fue motivado lo lleva mucho más lejos que lo que él mismo había pensado, y con el mismo modo, en los casos opuestos, la parálisis cada vez es más acentuada en los que no quieren ser motivados o estimulados.
En esta vida está visto que en muchísimos casos la parálisis llega a ser progresiva, y si nada se hace con ella difícilmente se puede revertir. Pareciera que lo conduce a uno a callejones sin salida en los que se pierde, incluso, la noción de poder regresar al punto inicial. Esto nos dice que debemos ser atentos de no quedar atrapados en estados de parálisis.
Debemos recordar que son mucho más favorables las iniciativas que lo molestan a uno y no la pasividad que algunos de nuestro derredor tienen porque piensan que es cosa de cada uno lo que quiere hacer en la vida, y mejor no estar molestando o bien entrometiéndose con lo que otros quieren hacer. Pero cuando se termina dando mérito y aprecio a aquellos que en un momento dado, con un comentario o con una observación puntual lo ayudan a uno, y como que la simple reacción termina con el estado casi de parálisis para iniciar un camino que sin lugar a duda lo lleva de un logro a otro hasta poder ver un éxito que inició porque hubo una reacción correcta.
El elemento que muy fácilmente puede minimizar el estado de parálisis es la creatividad en asuntos de los más simples e insignificantes, pero que cuando se ponen en acción se inicia a ver un panorama que transforma al que acepta el reto en un individuo emprendedor y útil para sí y para los suyos también.
Para llegar a la meta es innegable que hay que completar los pasos intermedios porque un salto no lleva a la meta. Por ello, si sabemos dónde estamos pensemos en el próximo paso que nos toca dar.