REGISTRO AKÁSICO

Presencia del gato salvaje

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Wobblies al revés. El término se refería a los militantes de la Industrial Workers of the World (IWW), agrupación de los obreros en oficios bajos de los EUA. Aunque agrupaban a mineros, también impulsaron la organización de proletariado agrícola, afroamericanos e inmigrantes, mujeres u oficios temporales. Rodeada de un hálito romántico, hay algunas películas sobre su abnegada propaganda realizada por cantantes y músicos populares. Los Trabajadores Industriales del Mundo tuvieron su mayor resonancia a inicio del siglo XX. Sin embargo, no consiguieron establecerse como un ente negociador debido a su ideología anarquista. Muchos de sus miembros son honrados como mártires debido a innobles asesinatos y linchamientos. Actualmente forma parte del movimiento izquierdista norteamericano.

Los activistas, al liderar el hartazgo por la explotación en el trabajo, dieron lugar a las llamadas huelgas del gato salvaje. El felino tenía cabida porque era una de las insignias de la IWW. El calificativo caracterizaba a los movimientos vociferantes, donde se desconocía el derecho a expresar oposición a la protesta en la asamblea de trabajadores. La formación de piquetes servía tanto para evitar a los rompehuelgas o esquiroles como para preparar el enfrentamiento con violencia. No se trataba únicamente de abstención al trabajo, sino medidas activas para preparar una batalla local.

Se justificaban esas actitudes por la denuncia de un entendido entre la autoridad, los dueños y la burocracia sindical. Las huelgas en los puertos no eran para favorecer a los estibadores, sino para dañar, en casos concretos, a uno u otro empresario importador. De esa cuenta, se debía analizar a quién beneficiaba indirectamente una protesta. No bastaba con esclarecer y hacer reflexionar a la ciudadanía, pues era de balde. La manipulación del acontecimiento consistía en esconder al beneficiario de los conflictos.

' Responder quién obtiene una ganancia fuera de los rivales aclara motivos de conflictos graves.

Antonio Mosquera Aguilar

La inversión surgida en el siglo XX consiste en utilizar las huelgas salvajes con igual maniobra. En el pasado se generaba el conflicto, pues se llamaba a la represión. En EUA se practicaron prevaricatos, linchamientos y masacres. Afortunadamente, el incremento del respeto al derecho de oposición ha propiciado la necesidad de llamar a la resolución del conflicto por medio del diálogo.

En el país, la huelga salvaje se ha originado por la debilidad de la institucionalidad y del liderazgo gremial y político. La acción más utilizada es la obstrucción de caminos. En general, la obligación de recurrir a los tribunales de trabajo ha evitado paros laborales extendidos. No obstante, hay algunas instituciones donde se utiliza la acción directa sin consideración por la representatividad de una base social. Un grupo de camioneros cierra carreteras. Si se pregunta, ¿a dónde va el dinero? La contestación es fácil: no se trata de solicitar la importación de petróleo desde Rusia para favorecer a Putin. En la petición misma se expresa continuar con los subsidios, donde señalar a los receptores de la ganancia extraordinaria se contesta fácil.

Ya vendrán las elecciones y en más de un municipio habrá la ocupación de piquetes. La mayor parte de los partidos y comités cívicos carecen de ideario político; por lo tanto, se puede inferir que la motivación es asaltar las finanzas públicas.
Se pide a la ciudadanía se pregunte: ¿cómo se consultó a la base para establecer las medidas de fuerza? Cuando se mantienen estas: ¿cómo se renueva la decisión de sostener los bloqueos hechos por piquetes? Finalmente, ¿quién recibe más dinero por el bloqueo hecho en una huelga salvaje?

ESCRITO POR:

Antonio Mosquera Aguilar

Doctor en Dinámica Humana por la Universidad Mariano Gálvez. Asesor jurídico de los refugiados guatemaltecos en México durante el enfrentamiento armado. Profesor de Universidad Regional y Universidad Galileo.