Conciencia
Responsabilidad al volante
La responsabilidad de los conductores y peatones es fundamental para reducir las fatalidades en el tránsito.
Cada cuatro horas muere un guatemalteco por un accidente de tránsito. Cifra alarmante, ya que la vida es lo más preciado. Según el Observatorio Nacional de Seguridad de Tránsito (Onset), todos días, en promedio, ocurren 22 accidentes. Hay muchas quejas por los embotellamientos que se han vuelto inmanejables, pero eso no quita tomar medidas para prevenir accidentes que salvan vidas y evitan lesiones personales.
El deterioro de las carreteras es un factor clave de accidentes que el gobierno debe corregir.
La seguridad vial es un reto fundamental que necesita atención de las autoridades y necesariamente de todos los ciudadanos. Actualmente los accidentes de tránsito se han convertido en la novena causa de muerte en Guatemala, cuando en otros países es la número 12, señala la Organización Mundial de la Salud (OMS). Luego del covid-19 se fueron incrementando las muertes por accidente de tránsito a una tasa de más de 12 por cada cien mil habitantes, siendo la más alta en el año 2023, de 12.9, cuando fallecieron 2,272 personas conforme el Onset. Si como sociedad se ha logrado bajar año con año la tasa de homicidios, ¡alerta! Los accidentes están en aumento. Es preocupante el primer semestre de 2024; el Onset señala que aumentaron un 4% respecto del mismo periodo del año pasado.
Hay días y meses más peligrosos. El fin de semana (viernes, sábado y domingo) ocurren más de la mitad de los accidentes (53%) y hay horas pico entre cinco de la tarde y medianoche. Un mes crítico es diciembre.
El parque vehicular en Guatemala va en aumento. Acorde a un estudio del Cien, entre 2016 y 2024 se incrementó un 73%, por lo que se llegó a 5.63 millones de unidades, posiblemente por no contar con un sistema eficiente de transporte colectivo. Las motocicletas aumentaron un 119% y representan el 47% del parque vehicular, mayor que los automóviles (36%). Ahora bien, las motocicletas están involucradas en la mitad del total de los accidentes, cuando el transporte pesado y colectivo, pese a representar el 7% de la flota vehicular, suma el 14% de los hechos.
Los principales factores de riesgo son el exceso de velocidad, la conducción bajo los efectos de alcohol y distracción por el uso de dispositivos móviles. Fatalidades que aumentan por no usar cascos de protección, no utilizar el cinturón de seguridad ni sistemas de retención infantil. Es importante resaltar que hay condiciones ambientales como el mal estado y diseño de las vías, obstáculos al transitar, la deficiente señalización, tanto horizontal como vertical, así como poca visibilidad —lo cual, tanto alcaldes como autoridades del Ministerio de Comunicaciones, deben contribuir a evitar—.
Claro que existen sanciones para los conductores que cometen faltas. Sólo el año pasado la Policía Nacional Civil (PNC) impuso alrededor de 75 mil multas, infracciones que en muchos casos contribuyen, por persuasión, a prevenir accidentes. Resulta que la mitad fue por no portar licencia de conducir, un 9% no tenía los papeles del vehículo y un 6% no portaba placa. También hay otros como por ir usando auriculares, tener las llantas lisas o rotas o no tener el equipamiento adecuado.
La primera y más importante recomendación está a cargo de la responsabilidad de los conductores de usar casco, cinturón, conducir responsablemente en buen estado y no utilizar el celular. Contar con licencia y los papeles del vehículo. No se debe esperar a ser multado para entrar en razón. Apreciar la vida y la de los demás. Es urgente mejorar la infraestructura vial, controlar el transporte colectivo y pesado —y ahora a los motoristas—. Son muy importantes las campañas de educación vial y habilitar canales de denuncia ciudadana, así como reiterar que el cumplimiento de las normas de tránsito es una obligación de todos. ¡Es momento de tomar acción!