ESCENARIO DE VIDA
El despertar de los mayas
Escribo este artículo dentro del avión saliendo de Flores, Petén, después de una ardua jornada de filmación de “Los secretos mejor guardados”, que ustedes pronto verán al aire.
No obstante, estos días que viajamos entre sitios arqueológicos y selva no dejaron de traerme viejos recuerdos de cuando filmamos de forma exitosa vía Guatevisión “Los secretos mejor guardados del 13 B`aqtún”, en 13 sitios y con 13 embajadores en el 2012. Me recuerda también el evento mundial que Roxana Baldetti, vicepresidenta de turno de esa época, nos bloqueó el denominado “Voces unidas para el cambio de era maya”. “Voces unidas” era una transmisión en vivo global de dos horas para el 21 de diciembre 2012, que llevaría la participación de guías espirituales mayas, arqueólogos, astrónomos, artistas, escritores, poetas y epígrafos, apostados en los sitios arqueológicos más importantes de Guatemala y desde donde saldría la señal satélite al mundo.
Recuerdo haber estado en una reunión en el Inguatc cuando el director de turno me dijo frente a media docena de trabajadores de la institución que me olvidara de un apoyo de Inguat para el evento “Voces unidas”, porque todo el dinero iba para Roxana Baldetti. Cartas circularon en diferentes ministerios por parte de Baldetti para que los ministros no apoyaran a nadie que quisiera realizar un evento en esa fecha, ya que todo iba para ella. Perdimos en esa oportunidad una gran inversión que provino de algunas embajadas que nos ayudaron a contratar expertos de calibre mundial para ayudarnos a llevarlo a cabo, y prácticamente había llegado a “mapear” los puntos estratégicos desde donde saldría la señal. Fue México —como siempre— el que supo decirle al mundo que ellos eran mayas; y Baldetti, con su insaciable ambición por el poder y el dinero, fue la que aprovechó para sí algo que nos pertenecía.
Esta fecha era para celebrar 13 b’aktunes según el calendario maya y prometía un cambio de consciencia, un cambio del ser humano para que dejáramos atrás las envidias, recelos, odios y corrupción. Para las culturas mayas de Mesoamérica, el 21 de diciembre marcó el fin del décimo tercer ciclo del calendario maya, en el marco del Oxlajuj B`aqtún. Fue la celebración del inicio de un amanecer que debía traer nuevas oportunidades de renovación y de generación de actitudes positivas para lograr una mejor humanidad. ¡Lo interesante es que en verdad se dio! El “amanecer” lo pudimos vivir en el 2015 con el derrocamiento de ambiciosos e inescrupulosos gobernantes que estaban llevando a Guatemala a la bancarrota. Lo vimos con la revolución pacífica que vivimos en la Plaza Mayor de la Ciudad de Guatemala, donde nos congregamos cientos de miles de guatemaltecos de posiciones socioeconómicas distintas. Lo vimos con el señalamiento y captura de los corruptos de La Línea. Lo seguimos viendo en el 2016, con la captura de muchos más involucrados en casos de corrupción.
Fuese coincidencia o no, el presagio se cumplió. Ahora somos ejemplo al mundo y muchos países quisieran copiar nuestro modelo. El despertar de los mayas lo vemos en espacios políticos, tales como la Mesa Indígena de Cambio Climático con una mayor y más reconocida participación y en la representación de pueblos indígenas en políticas y legislación nacional, incluyendo delegados indígenas en la Cop 21 de París, Francia, a finales del 2015. Aunque “Voces unidas para el cambio de era maya” no llegó vía satélite, como hubiésemos querido, sí llegó, pues ahora estamos juntos lanzando nuestra voz para una Guatemala diferente.