Tuve la oportunidad de conocer Alemania en esa época, siendo jefe de Redacción de este diario, ocasión que aproveché para entrevistar al presidente del Senado de Berlín, Wolfgan Fabib, acerca de la posibilidad de la caída de dicho muro. Respondió: “El muro caerá tarde o temprano, en breve, a decir de los últimos acontecimientos, pues se han dado pasos positivos para lograr esta meta, la posición de entendimiento adoptado por las nuevas autoridades de la Unión Soviética e influencia del Mercado Común Europeo”.

Indudablemente muchos lectores, especialmente los relacionados con el problema, han de haber asegurado que el parlamentario alemán y el periodista guatemalteco estaban locos, pero no, la noticia resultó verídica, causando conmoción en Europa y en el mundo entero. Esta delegación guatemalteca fue invitada por la Fundación Friedrich Nauman, que en ese entonces dirigía acertadamente el licenciado y amigo Joaquín Iblaker, estando integrada además por los dirigentes cooperativistas Rodolfo Orozco Velásquez, de Confecoop; Vinicio Villar, Inacop; Síncrito Cifuentes, Fenacoac; Odilio Blanco Barahona y Hugo Baldomero Pérez, Cendec, y Roberto Herrera, Huehuetenango; Héctor Luna Tróccoli, diputado; Edín Velásquez y Jacobo López Coarchita, Banco de Guatemala, e Isaías Figueroa, Bandesa.

Aquel viaje nos dejó gratos recuerdos y tantas anécdotas. Una, propiciada por el dueño de un restaurante en la ciudad de Bonn, quien en su grato mensaje de bienvenida dijo no conocer Guatemala y lamentar que no exportara buen café como el que nos servía en ese instante, cuya súper exquisitez jamás habíamos saboreado —posiblemente también hasta la fecha—, provocando la reacción de los presentes. Al preguntarnos si su aseveración era cierta, la respuesta fue afirmativa. Concluyó su mensaje diciendo que sí conocía nuestro bello país y que el café degustado sería orgullosamente  chapín. Hubo aplausos, sonrisas, abrazos y mucha satisfacción.

LAPSUS: En mi artículo anterior “Calamidades”, los tres temas debieron encabezar con subtítulos. 1) La niñez y juventud. 2) Continuarán accidentes de tránsito. 3) Buena puntería de policías. Y en el último párrafo: “Tampoco hay que citar horarios, lugares o procedimientos, para no darles ventaja a tan repudiables cafres”, me refería a criminales, no a pilotos.