1. Mi primer deseo es que sigamos apoyando a la Cicig y al MP, para que Guatemala sea próspera sin corrupción, haya trabajo para todos y se mejore la economía de Guatemala. En algunos editoriales se dice que la crisis política no golpeó nuestra economía, pero quizás solo hablen de las grandes empresas, pero los pequeños empresarios sí fueron afectados; unos cerrando negocios y otros paralizando o disminuyendo sus inversiones en los comercios; otros quedando desempleados, otros sin poder pagar sus deudas y otros cerrando asociaciones. Fue una cadena viciosa que mermó la fluidez de capital y dejó a muchos con los bolsillos vacíos.

2. Mi segundo deseo es atacar las sequías de este año. Los pequeños agricultores se podrían beneficiar con un programa del Maga sobre reservorios y sistemas de riego en El Progreso, Chiquimula y Zacapa. Los sectores azucareros, cafetaleros y huleros también están siendo azotados y tendrán que implementar programas de mitigación contra el cambio climático, exhacerbado por el fenómeno de El Niño. Un ejemplo de extrema sequía se dio en Perú con una preciosa laguna llamada La Colorada, que hasta hace unos días tenía una profundidad de 2.5 metros y se secó por completo debido al cambio climático. Por ello, en Guatemala debemos poner en marcha, de carácter urgente, el Fondo Nacional de Cambio Climático y el Plan Nacional de Adaptación y Mitigación.

3. Mi tercer deseo es que el Congreso apruebe la ley de agua, pues la cantidad de agua disponible en el país se está mermando debido a que no hay un marco legal que regule el uso adecuado y eficiente del recurso vital. Hoy por hoy, el 99% de los afluentes están contaminados, lo que marca la urgencia de contar con una normativa específica en el país.

4. Mi cuarto deseo es abordar urgentemente el tema de la basura, tanto de parte de los ciudadanos como las autoridades municipales y el gobierno central. 5. Mi quinto deseo es que se reactive el salvamento de nuestros lagos de Amatitlán y Atitlán, y otras lagunas que sufren en Guatemala. También es pertinente hablar de las cuencas hidrográficas que merecen una especial atención.

6. Mi sexto deseo es que hagamos cumplir la Ley ProBosque, una ley que trae enormes beneficios para la reforestación y protección del recurso forestal del país. 7. Mi séptimo deseo es que el “Pacto Ambiental” cobre fuerza trabajando de la mano todos los sectores y ¡que el próximo gobierno le dé continuidad!

8. Mi octavo deseo es que coloquemos a Guatemala como destino turístico mundial, pues contamos con gente linda que vive en un país multicultural, multiétnico y multilingüístico. Poseemos impresionantes sitios arqueológicos e incontables lugares paradisíacos que la mayoría del mundo ni sospecha que existen. Tenemos que cambiar la tónica de nuestros mensajes al exterior, tal y como lo hizo Colombia al contarrestar el estigma de riesgo cuando dijo “el riesgo es que te quieras quedar”.

El 9 de enero, a las 20 horas, sintonicen por Guatevisión “Los secretos mejor guardados” del pacto mundial climático, al que se comprometieron 196 países del mundo. Verán imágenes en París de la Convención, y la lucha de nuestros Delegados. Gracias a la Embajada de China ( Taiwán), a la Embajada de Francia en Guatemala, y a PNUD por el recurso financiero; y al ministro Andreas Lehnhoff, del MARN, por creer en mí.

Feliz año nuevo a la J.D de la Fundación del Bosque Tropical y a todos mis amigos, colegas de oenegés que trabajaron incansablemente en Francia. ¡Feliz año! Dejémonos de egoísmos, y hagamos una Guatemala mejor para el 2016.