Hace 43 años nació la Medio Maratón de Cobán, por inquietud de Cayetano Gálvez (QEPD), que muchas veces fue invitado a participar a las competencias atléticas septembrinas que se organizaban al inicio de la década de 1970 en la ciudad de Salamá, con motivo de la feria de San Mateo Apóstol, en donde se invitaba a atletas de El Salvador y Honduras. Don Cayetano, que era el presidente de la Asociación de Atletismo de Alta Verapaz, tomó estos eventos como referentes y, con el apoyo de altaverapacenses de aquella generación y de distinguidos cobaneros, que en aquel momento ocupaban cargos importantes en la administración pública, nació la Medio Maratón, que al inicio se denominó “Carrera Centroamericana”, en la cual participaron 96 atletas. Ahora son miles de corredores, nacionales e internacionales de elite mundial, por lo que se puede considerar este evento como el más importante de Latinoamérica.

Vale la pena reconocer el esfuerzo de muchos altaverapacenses que han hecho aportes importantes para que la actividad tome las dimensiones que ha alcanzado. Va la felicitación a toda la familia cobanera, que hace que la carrera sea perfectible y tome más auge, sin perder las directrices de quienes actualmente dirigen esta importante justa deportiva.

Así también nació, hace 15 años, la Medio Maratón Travesía al Valle, que se corre en los municipios de Salamá-San Jerónimo-San Miguel Chicaj, siempre territorio de las Verapaces. Retoma esa iniciativa con los mismos objetivos, sin perder la visión con que se crean estos eventos que implican sacrificio, inversión, entrega e incorporación de muchos ciudadanos, con el reto de convertirse en íconos de solidaridad para hacer grandes estas justas, que muchos no dimensionan hasta que se ven involucrados en ellas.

La Medio Maratón Travesía al Valle quiere ser grande con el ímpetu de la juventud, haciendo gala del principio de que alcanzar la victoria y la gloria, y estar en el pódium para ser venerado por el laurel del triunfo, corresponde únicamente a los perseverantes, y para hacer grande un evento se sufre, se reciben críticas, envidias, egoísmo, intrigas y todos los antídotos que no valoran el trabajo de otros, pero los muros que impiden alcanzar el triunfo se rompen con perseverancia y solidaridad.

Este año se quiere destruir el trabajo de años, legado de Don Cayetano y buenos altaverapacenses. Es momento de unir ideas para hacer más grande este evento, del que todos ganan: autoridades, empresas, medios de comunicación, bancos, industria hotelera, turismo, deporte y el pueblo en general.

Invito a los verdaderos verapacenses a ser propositivos y que abonen esfuerzos para convertir la carrera en un verdadero patrimonio deportivo de la ciudad imperial y de Guatemala.

checharin.sagas@yahoo.com