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Suben las tasas de interés: Los tres escenarios que proyectan economistas sobre el costo del dinero

Un aumento gradual de la tasa de interés líder puede controlar la inflación en Estados Unidos, pero en Guatemala, una decisión similar puede tener otras consecuencias.

Tasa de interés FED

Los movimientos del ajuste de la tasa de interés por la FED podrían ser moderados, según expertos. (Foto Prensa Libre: Hemeroteca)

El ciclo de tasas de interés muy bajas en los Estados Unidos ya pasó y ante el reciente aumento de 0.25%, más los que ya se anunciaron para el resto del año (posiblemente hasta 2%), hay tres escenarios que podrían presentarse en el futuro (alto, mediano y bajo).

En el primer caso, la tasa líder sube hasta donde sea necesario hasta frenar la inflación, a costa del crecimiento económico; en el moderado, hay un movimiento alcista gradual; y en el bajo, la tasa se queda donde está (0.25%-0.50%). En cualquier caso, habrá repercusiones en Guatemala, vía decisiones de la Junta Monetaria (JM).

La tasa líder en Guatemala -que es la referencia para las tasas activa y pasiva del sistema financiero- se ha mantenido en 1.75% desde mayo de 2020, cuando se redujo en 0.25% para estimular la economía por la vía de reducir el costo de los créditos bancarios, induciendo la inversión y el consumo de bienes y servicios.

Pero a consecuencia del conflicto entre Rusia y Ucrania, se han encarecido muchos productos en el mercado internacional, comenzando con el petróleo, que a su vez, presiona los precios de los combustibles que países como Guatemala, compran en el exterior.

Es así como en febrero y marzo se ha observado un encarecimiento que llevó a más de Q40 el galón de gasolina y diésel, con sus efectos sobre los costos de la cadena de suministros hasta llegar al consumidor final.

La crisis mencionada también ha presionado los precios en Estados Unidos, por lo que la Fed decidió subir su tasa líder, a efecto de controlar la inflación, lo que tiene diversas implicaciones en América Latina y el mundo, comenzando con el costo de los préstamos negociados con bancos o el gobierno de ese país.

Y la medida comienza a replicarse en varios países de la región, comenzando con México. El próximo jueves 31 de marzo, las autoridades guatemaltecas anunciarán la decisión que se tome al respecto.

El mejor escenario

A la pregunta ¿cuál escenario ve usted en cuanto a las decisiones que tomará la Fed y cómo se reflejarán en Guatemala?, Víctor Mancilla, exjefe de la Superintendencia de Bancos (SIB); y Juan Pablo Carrasco, presidente de la Cámara de Comercio Guatemalteco Americana (AmCham), coincidieron en que todo apunta a un panorama moderado.

Para Estados Unidos, el disparo de la inflación debe frenarse, expresó Mancilla, y hay una expectativa moderada porque la política monetaria de ese país también incluye el empleo, lo que no sucede en Guatemala.

“Tiene que haber un escenario poco moderado y uno moderado, ya que se manejas las variables precios y empleo, a diferencia de Guatemala que, por mandato legal, se centra en los precios”, expuso Mancilla.

Reiteró que la expectativa es para un escenario medio y la Fed tendrá que reaccionar ante los precios altos; y por otro lado, puede haber efectos políticos, pues le pasarán factura al partido de gobierno que permita un alza desmedida de precios.

Al referirse a un escenario moderado, Mancilla destacó que podría manejarse alrededor a un cuarto de punto a medio punto, como un rango, ya que en la economía de EE. UU., medio punto o un punto es “bastante relevante”, y suficiente para marcar una tendencia, así como enviar el mensaje sobre la intención de la autoridad monetaria sobre el control de la inflación.

En ese sentido, Carrasco enfatizó que el tema de las tasas de interés de la Fed es de interés global, ya que se esa observando una inflación sin precedentes en EE. UU., y la única forma de controlarla es por medio de ese instrumento, aunque tal medida genera otros efectos económicos que se deben observar (como la baja del crédito al sector privado y por ende, de la inversión).

Para Guatemala, reiteró que esa medida podrá incidir en la limitación del acceso al crédito (principalmente el de consumo), aunque no necesariamente en la tasa de interés que se establece en la banca para los préstamos empresariales.

A la expectativa

Sobre la decisión que adopte la JM en Guatemala en esta semana, ambos entrevistados aseguraron que se mantiene la expectativa, dados los aumentos de precios observados en marzo,  sobre todo en los derivados del petróleo.

“La inflación se va a disparar por el efecto del encarecimiento de los combustibles. Como es muy reciente, todavía no se han medido los efectos económicos, pero realmente los precios se han disparado en todo. En un escenario moderado para Guatemala, el ajuste de la tasa líder podría ser de 0.5% a 0.75%, para enviar el mensaje de que las autoridades monetarias están dispuestas a abatir la inflación”, dijo Mancilla.

La posición de Carrasco es que en este año habrá movimientos bruscos en los precios de materias primas, productos y bienes de capital, así como de bienes terminados. “Los empresarios deben pensar en escenarios a mediano plazo en los que puede haber fluctuaciones importantes no solo en tasas de interés, sino también en el tipo de cambio y el acceso a las materias primas que Guatemala importa”.

CES: Hay que estar preparados

Carlos Amador, presidente del Consejo Económico y Social (CES), explicó que ante la coyuntura actual por el conflicto entre Rusia y Ucrania, Guatemala debe estar preparada ante “los nubarrones”.

Aclaró que de momento, el impacto del conflicto no se ha logrado dimensionar en todo su alcance, pero al momento de observar que todos los indicadores energéticos van para arriba o que hay menos oferta y más demanda de granos como trigo y maíz, los problemas se podrían materializar para entrar a un entorno diferente al que se ha tenido.

Por medio de un comunicado de prensa, el CES declaró que la coyuntura económica mundial está marcada por un proceso inflacionario que muestra una combinación de causas (oferta y demanda) por lo que se deben implementar instrumentos que permitan el abasto de bienes y servicios en caso de que sea necesario.

Al respecto, Amado dijo que la exhortativa es que se garantice la disponibilidad de granos básicos para evitar una escasez y que tomar las medidas necesarias para disminuir el impacto que eso pueda tener en los precios.

En cuanto a la aprobación de compensadores sociales, indicó que si se llega a experimentar escasez o un alza desmedida de los precios básicos, el Estado debe intervenir de forma adecuada para proteger a los más necesitados, limitando en tiempo y alcance, cualquier tipo de subsidios.

El CES percibe que podría presentarse desabastecimientos en una serie de productos, lo que se reflejará en precios y disponibilidad, por lo que las autoridades económicas deben implementar instrumentos de política comercial como la apertura de contingentes de importación o disminución de aranceles, descartando el control de precios.

“Es un momento para que el Estado esté listo para actuar y tomar las decisiones adecuadas”, concluyó Amador.

 

ESCRITO POR:

Urias Gamarro

Periodista especializado en macroeconomía, finanzas públicas e infraestructura, con 20 años de experiencia en medios radiales, impresos y digitales.