Nacido en la isla de Madeira el 5 de febrero de 1985, en un entorno muy humilde, la vida de Cristiano es la de un niño destinado para triunfar en el mundo del futbol, con unas condiciones innatas.
Comenzó a experimentar con el futbol profesional a los 17 años. Su talento en el Nacional no pasó inadvertido para el Sporting de Lisboa, que lo fichó tras haber superado una exigente prueba de tres días.
Pasó de ser referente del Sporting a fichar por el Mánchester United, con el que ganó su primer balón de oro —2008—.
Tras su etapa exitosa en Mánchester, Florentino Pérez, presidente del Madrid, rubricó su fichaje. Un nuevo galáctico. El Bernabéu se llenó para la presentación del fichaje más caro de la historia, y desde entonces disfruta de un jugador siempre hambriento que da todo.
Es el madridista que menos partidos necesitó, 92, para alcanzar el centenar de goles en la Liga, el primero en la historia de la Liga que consiguió marcar a todos los equipos a los que se enfrentó en una temporada o el único que marcó en seis clásicos seguidos en Barcelona.
Su predicamento fue creciendo hasta que encontró lo que tanto demandaba. El apoyo total del club, técnicos y compañeros. Un cántico de una afición rendida a sus goles y liderazgo. El hábitat perfecto para seguir batiendo récords. El insaciable Cristiano ya quiere más.