“Este tipo de profesional debe tener un genuino interés social, disfrutar de la comunicación como un ejercicio creativo, casi como un arte, y disfrutar el contacto con los demás”, explica el periodista Gustavo Montenegro, editor dominical de este matutino, quien tiene 20 años en esta profesión.
Objetividad
Sobre todo, debes tomar en cuenta que un comunicador es un servidor que informa a la sociedad y, en ese sentido, debe velar porque esa búsqueda de información sea certera, precisa y objetiva.
“Quien vea la carrera periodística en su vocación, debe ser sensible a su realidad. Considero que debe verse a sí mismo como un agente crítico, que cuestione, que analice, que le guste investigar y describir su entorno”, comenta Eswin Quiñónez, con 11 años de experiencia en el medio y catedrático del curso Narrativa Online, en la Universidad del Istmo.
El oficio periodístico es amplio en plataformas y temáticas. Hay medios escritos, radiales, televisivos, fotográficos o alternativos, y en cada uno hay ramas específicas: política, seguridad, justicia, economía, tecnología, cultura y espectáculos, deportes, entre otros.
“Para ser un buen reportero, no necesariamente tenés que estudiar comunicación; puede ser letras, filosofía, ciencias políticas… El reto es que al abordar un tema tengás la capacidad técnica de manejar datos y la capacidad narrativa de reflejarlo, para que sea un aporte a la sociedad”, resalta Montenegro.