Los resultados iniciales del estudio se publicaron en el 2006 y mostraron un vínculo preliminar entre comer carne roja y el cáncer de seno después de 12 años. Las nuevas investigaciones confirmaron las conclusiones anteriores con más información de seguimiento, y analizaron otros tipos de cáncer de mama.
Con un modelo estadístico, los expertos estimaron que entre las mujeres que comían más carne había 6.8 casos adicionales de cáncer mamario por cada mil mujeres en el seguimiento de 20 años. El estudio también señala la posibilidad de que otros factores puedan explicar el aparente vínculo.