La diverticulosis hace referencia a la existencia de divertículos en el colon, y la diverticulitis ocurre cuando alguno de estos se inflama. La primera es mucho más frecuente en las personas mayores de 50 años y aumenta con la edad. “Su síntoma principal es el dolor abdominal continuo o intermitente. Normalmente este malestar se localiza en la parte inferior izquierda del abdomen, donde se sitúa el sigma —cerca del recto—”, explica Ramón Angós, especialista en problemas digestivos de la Clínica Universidad de Navarra.
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Este padecimiento suele provocar dolor agudo, constante, en la fosa iliaca izquierda —por eso algunos le llaman “la apendicitis del lado izquierdo”—, fiebre fuerte, cambio del ritmo intestinal, —desde diarrea hasta estreñimiento—, náuseas, vómitos y distensión abdominal.
Diagnóstico
Existen diferentes exámenes para detectar esta dolencia. Por ejemplo, el enema opaco —rellenar el colon con contraste— es una prueba fácil y eficaz, pero cada vez se usa menos.
La colonoscopia —introducir un endoscopio por el ano para ver el colon— es la que más se usa y se logran ver bien los divertículos. Sin embargo, está contraindicada cuando hay diverticulitis.
Ante la sospecha de esta, los métodos más fiables y seguros son la tomografía computarizada y la ecografía, ya que permiten identificar la existencia de complicaciones, como abscesos y fístulas, y así indicar el tratamiento que hay que seguir.
Tratamiento
“Una dieta rica en fibra vegetal, con suplementos de salvado alivia el dolor abdominal y mejora el ritmo defecatorio. Los fármacos antiespasmódicos alivian los dolores”, comenta Angós.
La diverticulitis se debe tratar inicialmente mediante reposo en cama, dieta absoluta, hidratación intravenosa, analgésicos y antibióticos intravenosos. “Las complicaciones como la perforación con peritonitis, el absceso o la fístula hacia un órgano vecino, se tratan con cirugía”. También ,cuando los episodios de diverticulosis se repiten con frecuencia y causa malestar en el paciente, se recurre a la cirugía, que habitualmente se hace con laparoscopia.
Factores de riesgo
Aunque no existe una causa específica, la deformación en la musculatura intestinal es más propensa en pacientes con un cuadro previo de colon irritable. Asimismo, se estima que una dieta inadecuada contribuye enormemente desarrollar esta enfermedad.
Otro factor que complica el tratamiento es que la diverticulosis no presenta síntomas en los primeros años. Esto significa que la persona presenta molestias cuando ya tiene diverticulitis.
Recomendaciones
Para evitar el aparecimiento de divertículos, las personas deben practicar actividad física constante, ingerir por lo menos dos litros de agua al día y llevar una dieta saludable que incluya frutas y verduras, así como gran cantidad de fibra y cereales integrales. Se sugiere evitar carnes procesadas y alimentos con exceso de grasa.
Fuente: Ramón Angós, especialista digestivo de la Clínica Universidad de Navarra. Más información por www.cun.es
