Esta investigación recopila detalles sobre el culto al Señor de Esquipulas en Latinoamérica, su impacto y su relación con la cultura de cada nación.
¿Cómo nace el libro?
El exilio es morirse un poco, pero siempre es recordar. Cuando comencé mi carrera en México, y aunque no me fue mal con los mexicanos, siempre quedaba la tristeza del país. El Señor de Esquipulas entonces era, para muchos de nuestra generación, un símbolo del tiempo de la liberación. Luego, trabajé en la zona mixteca, en Oaxaca, México, y veía pasar los buses que se dirigían a Guatemala llenos de peregrinos que viajaban a Esquipulas y a los días volvían con los adornos tradicionales de aquel lugar. Años después vi cómo El baile de los parachicos, en Chiapas, hacía su primera presentación en la iglesia de San Jacinto, donde veneraban al Cristo Negro. Es una relación maravillosa con Guatemala. Ya en Nuevo México, Estados Unidos, encontré una réplica del Cristo de Esquipulas y decidí empezar a recabar información de este culto y la importancia del 15 de enero.
¿Qué encuentra en la devoción?
Fui al municipio de Esquipulas a conocer su feria y ver su encanto. Vi cómo toda la gente, de las distintas clases sociales llegaban a venerar la imagen. Desde 1963 recorro distintos lugares donde se visita al Cristo y he recolectado imaginería, textos, poemas, rezos y canciones que reflejan la espontaneidad creativa; al final he juntado un material inmenso. Este libro entonces es la recopilación del trabajo que mis estudiantes investigaron, de lo que se vive en sus pueblos, y lo que encontraron fue una gran riqueza cultural, aun siendo México.
¿Cuál es la importancia de la devoción a Esquipulas en Guatemala?
El culto a Esquipulas continúa y es enorme. Todos los pueblos buscan un punto focal a donde llevar sus problemas. Encontré al Cristo en Argentina y supe que llegó hasta allá por una peregrinación de mexicanos que lo llevaron.
¿Con qué se topará el lector en la publicación?
Con la riqueza en las variaciones de practicar el culto al Señor de Esquipulas. El investigador Alfonso Arrivillaga, por ejemplo, escribe sobre la visión garífuna de la imagen.
¿Cómo ve el mundo indígena el culto a Esquipulas?
Ellos tienen otra visión del mundo. En el pueblo existe la llamada Piedra de los Compadres, que para ellos no es una leyenda sobre el pecado de dos amantes, pues lo ven desde el punto de vista prehispánico, como la unión con la tierra y el encuentro con el inframundo. Esto no es algo malévolo; simplemente es un lugar de estar. He visto cómo en un montículo de enfrente los visitantes construyen sus peticiones. Si desean una casa, la arman con piedras. Los visitantes llegan a dejar sus peticiones a la Piedra de los Compadres y luego van a la Basílica.
La imagen ¿originalmente es morena?
(Suspira) Hay disputas por este tema. Por los 400 años de la imagen se hicieron trabajos y se descubrió que tiene hasta tres encarnaciones. Hay que recordar que antes de llegar a la Basílica, la imagen estuvo en una capilla en contacto con velas de cebo y sin protección alguna, y se cree que con el tiempo este se fue oscureciendo. ¿Si es oscuro? Para los creyentes el Cristo de Esquipulas es oscuro, y eso no va a cambiar.
El investigador
Carlos Navarrete es antropólogo e investigador de la cultura indígena.
Carlos Navarrete nació en Quetzaltenango en 1931.
En el 2005ganó el Premio Nacional de Literatura Miguel Ángel Asturias, por su trabajo investigativo.
Estudió Historia, Antropología y Literatura en la Universidad San Carlos de Guatemala y posteriormente se graduó como doctor en Antropología por la Universidad Autónoma de México.
De su obra literaria destaca Los arrieros del agua (1997).
Entre su trabajo de investigación figuran los libros Las Esculturas de Chaculá, Huehuetenango (1979), Guatemala, Las rutas de comunicación prehispánica en los altos Chuchumatanes (1980) y Relatos mayas de tierras altas sobre el origen del maíz (2002).