“Las cosas están yendo bien” , dijo en una teleconferencia en la que también participó Roger Wiens, del Laboratorio Nacional de los Alamos, el investigador principal de la ChemCam del Curiosity.
“Todos los instrumentos que estamos probando están funcionando y estamos orgullosos de anunciar que el instrumento DAN (Dynamic Albedo of Neutrons), ha sido encendido hoy y ha operado exitosamente” , aseguró Grotzinger.
DAN es un espectrómetro de neutrones (DAN) con capacidad para detectar hidrógeno, cuya presencia puede significar que hay agua en forma de hielo o en la superficie de un mineral, en el subsuelo a una profundidad de hasta un metro.
Este es el instrumento que ha aportado la agencia espacial rusa a este proyecto en el que participan 7 países además de EE.UU. (España, Rusia, Francia, Alemania, Italia, Canadá y Japón) que han contribuido a dotar al Curiosity con los instrumentos tecnológicos más avanzados para que pueda llevar a cabo su misión.
El aparato realizó varios disparos de neutrones sobre la superficie marciana al tiempo que se activó el sistema de radiación que “escuchó” a DAN y confirmó que estaba funcionando.
Grotzinger señaló además que también realizaron pruebas con el instrumento REMS, la estación medioambiental aportada por España, y adelantó que esperan poder divulgar los primeros datos científicos recolectados la próxima semana.
Curiosity ya tiene en marcha sus cámaras y la NASA está definiendo cuáles serán los primeros movimientos del rover y los puntos que visitará para empezar con las primeras excavaciones según el plan previsto.
El primer destino será un lugar denominado Glenelg, una intersección de tres tipos de terrenos que ha causado especial interés en los científicos porque creen que puede tratarse de una plataforma de roca adecuada para la primera perforación.
Los científicos estiman que en alrededor de un año, el Curiosity llegará a las laderas del monte Sharp, pero antes pasará por las marcas que dejaron al aterrizar los motores de los cuatro propulsores.
También han identificado la primera roca sobre la que probará el láser de la ChemCam en los próximos días, la N165, situada a poco más de dos metros de donde se encuentra el rover.
“Nuestro equipo ha esperado 8 largos años a que llegara este momento” señaló Wiens, quien espera poder compartir a principios de la próxima semana cómo fueron esos primeros disparos.
La ChemCam disparará una treintena de disparos de láser en diez segundos para calentar la roca hasta tal punto que sus moléculas se conviertan en una bola de fuego para que los instrumentos del Curiosity analicen los colores que desprende, que darán pistas sobre los átomos de los que está compuesta.