“Diseñé una producción muy pequeña. Mi intención era poder decidir mi propia ruta, no depender de nadie para hacer cine”, expresa Hernández.
Producción
La cinta fue rodada en una semana, lo que representó el mayor reto para su director.
“En ese momento tenía —y aún tengo— una frustración por la falta de políticas para la creación artística en Guatemala. También me deprimió bastante lo pobre y lo light de la reciente campaña electoral del país. Mezclo ambos elementos en Hasta el sol tiene manchas”, cuenta el cineasta.
La cinta se centra en la historia de dos hombres: uno con discapacidad mental, que intenta seducir a la gente para que vote por un candidato presidencial, y el otro es un enmascarado que asalta a las personas a pelotazos en la cabeza y que, además, pinta grafitos. Ambos se hacen amigos y eso ocasiona una fatalidad que los hace saber que el mal existe.
La cinta fue grabada en un penthouse que funcionó como foro, y todos los escenarios fueron dibujados en un pizarrón gigante.
Es protagonizada por José Miguel Orozco y Alberto Rodríguez, e incluye música del grupo guatemalteco Tiananmen.
Estreno
En el marco de la colocación de la primera piedra para remodelar el edificio Cine Lux para adaptarlo como nueva sede del Centro Cultural de España en Guatemala (CCE/G), Julio Hernández decidió presentar la única proyección en Guatemala de Hasta el sol tiene manchas.
Para Hernández —director de Gasolina (2008) y Marimbas del Infierno (2010)—, la decisión de proyectar la película en esta actividad es una forma de corresponder el apoyo que ha recibido del CCG/E.
“Creo que sin el CCE la creación artística y su difusión sería más precaria de lo que es en Guatemala. Entonces es una manera de decirles: continúen invirtiendo y exponiendo la creación nacional en su espacio”.
El director de cine considera que en el país hay poca cultura cinematográfica, y además, su trabajo tiene texturas que no se comprenden del todo aquí. Por esa razón dice que prefiere ahorrar energías y enfocarse en proyecciones en el extranjero.
Lo próximo
Hernández indica que ya tiene programadas proyecciones de esta película en Francia, y que está en la espera de estrenarla en otros países.
“Estoy por rodar en unos días una cinta con mis hijas y mi esposa. Es una película muy pequeña que haré yo solo con un sonidista —José Rommel Tuñon— y posiblemente se llame Elogio a la desarmonía. En Argentina gané un fondo danés y entonces se me financiará una película, que posiblemente sea un western en bicicletas que se llama Disparos en la noche. En agosto estreno mi cuarto largometraje, Polvo, en el festival de Locarno, Suiza.
Para mí es un sueño estrenar está película en dicho certamen. Es un festival muy prestigioso y con una historia importante”, puntualiza Hernández.