Este descubrimiento podría conducir a nuevos métodos de tratamiento de la intoxicación y la adicción a la marihuana y, según el artículo, “también permitiría que los investigadores aislen las propiedades medicinales del cannabis bloqueando sus efectos somáticos y sobre la conducta”.
Las hormonas esteroideas son moduladores importantes de la actividad del cerebro y el comportamiento, y desempeñan papeles cruciales en la regulación de actividades fisiológicas como el comer, el despertarse, la reproducción y la conducta sexual, y participan en la regulación de la memoria y los estados de ánimo.
La pregnenolona se considera como la precursora inactiva de todas las hormonas esteroideas y, según señalan los autores, sus efectos funcionales no se han investigado bien.
“La administración de THC incrementa sustancialmente la síntesis de la pregnenolona en el cerebro por vía de la activación del receptor Tipo 1 de canabinoide” , añadió el estudio. “La pregnenolona, entonces, actuando como inhibidor específico de señal del receptor reduce varios efectos del THC”.
“Esta reacción negativa mediada por la pregnenolona revela un ciclo, previamente desconocido, que protege al cerebro de la activación excesiva del receptor, lo cual podría abrir la senda para el tratamiento de la intoxicación y la adicción a la marihuana”, sostuvo el artículo.
Los investigadores estudiaron ratones y ratas de laboratorio para determinar en qué forma las drogas más consumidas como la cocaína, la morfina, la nicotina y el alcohol afectan los neuroesteroides, esto es los esteroides producidos directamente en el cerebro de los roedores.
Inesperadamente encontraron que el THC, en particular, conduce a un incremento enorme de la pregnenolona, uno de los bloques de construcción de los neuroesteroides, mediante la activación del receptor de canabinoide en los ratones.