Los aficionados a este cine más bien estridente, rico en danzas y canciones, podrán recorrer su historia, desde los primeros filmes mudos y en blanco y negro hasta los muy populares blockbusters de los últimos años, estos últimos proyectados en las pantallas de salas del mundo entero.
“Ya era el momento para India de tener su museo de cine. Teníamos archivos pero no un museo. Y, en nuestros días, un museo puede estar vivo gracias a la tecnología y la interactividad”, declaró su conservador, Amrit Gangar.
En dos de las plantas del edificio, con unos 560 metros cuadrados, el museo expone objetos antiguos, recuerdos, películas y útiles de trabajo para la producción de filmes. Los visitantes pueden apreciar un panel pintado que anuncia el célebre melodrama de 1957 Mother India, y escuchar cantar a K.L. Saigal, considerado la primer gran superestrella del cine en lengua hindi.
El museo no se contenta con homenajear al cine del país en hindi, conocido por el término genérico de Bollywood, sino también al realizado en otras lenguas y en otras regiones de India, donde se producen alrededor de mil 500 películas al año y cada vez se exportan más hacia todo el mundo.
“Todas las facetas del cine indio están representadas”, explica Anil Kumar, director de marketing de Films Division of India, una organización gubernamental que apoya la producción cinematográfica.
El museo ya está terminado y se inaugurará dentro de algunas semanas.