A principios de mes se anunció que esta novela erótica, que narra una relación con tintes sadomasoquistas, había ganado en la categoría de ficción popular, lo que la incluía entre los finalistas para optar al máximo galardón, el de Libro del Año.
La autora dijo estar “desbordada” y “verdaderamente agradecida” por este maravilloso reconocimiento.