LA CREACIÓN DE ADÁN
El italiano Miguel Ángel (1475-1564) creó esta magistral obra en 1510. Este episodio de la Creación del Hombre tiene como punto central el contacto entre los dedos de Dios y los de Adán, a través del cual se transmite el soplo de vida que Dios Padre le obsequia a Adán.
IVÁN EL TERRIBLE Y SU HIJO
Esta es una de las obras más reconocidas del escultor ruso Iliá Repin (1844 – 1930). El motivo del cuadro es un episodio de la vida del zar Iván el Terrible. Para Repin, la pintura representa el amor del padre por el hijo, pero también el horror porque ambos han matado a su propio linaje.
SAN JOSÉ Y EL NIÑO
El español El Greco (1541- 1614) pintó este cuadro en 1597, y es una de las primeras pinturas occidentales donde se representa a San José como un caminante que protege y guía al Niño Jesús. El pequeño se abraza a la cintura del padre, mientras este lo protege con su mano izquierda.
MARTE Y VENUS ENCADENADOS POR EL AMOR
La pintura del italiano Paolo Veronese (1528 – 1588) creada en 1570, muestra al hijo fruto de la relación entre Venus, diosa del amor, y Marte, dios de la guerra.
RETRATO DE MI PADRE
La obra de la mexicana Frida Kahlo (1907-1954) estuvo influenciada por la figura de su padre, quien la guió por sus primeros pasos en el arte. Wilhelm Kahlo fue fotógrafo y pintor, y le enseñó a ella a usar la cámara y a revelar fotografías. La pintura es de 1951.