Eso hizo popular al personaje y lo convirtió en un ícono de la cultura moderna, y su salto a la pantalla contribuyó a lograrlo.
La actriz Renée Zellweger fue la elegida para interpretar a la solterona treintañera en el cine. La primera entrega llegó en el 2001.
Brigdet ya tenía rostro y era una rubia que luchaba con su peso, simpática y divertida, con gran habilidad para meter la pata, un estatus laboral cuestionable, y en busca de su príncipe azul.
Un amor que terminara con sus noches sentada frente al televisor, con una copa de vino y un cigarrillo en la mano.
Junto a Zellweger aparecieron Colin Firth y Hugh Grant, que interpretaron a Mark Darcy y Daniel Cleaver, respectivamente, los galanes que pelearon por el amor de Bridget Jones en las dos primeras películas El diario de Bridget Jones (2001) y El diario de Bridget Jones: Sobreviviré (2004).
En la tercera entrega se añade al reparto el actor Patrick Dempsey en el papel de Jack Qwant.
Vigente
Según Zellweger, pese a que ya transcurrieron 12 años de la última película, Bridget Jones sigue siendo un referente para las mujeres del siglo XXI, “y no hablo solo de niñas, los hombres también se pueden identificar porque es un personaje muy humano, vulnerable, imperfecto y seguir sus pensamientos, sus ansiedades, es tremendamente reconfortante”.
En esta tercera entrega, “Bridget Jones tiene éxito en lo profesional y es más segura, aunque sigue siendo la misma chica enamoradiza e imperfecta, que es lo que más me gusta de ella, porque hace que la queramos muchísimo”, afirma la actriz.
¡Será mamá!
En Bridget Jones’ Baby, la protagonista tiene 40 años, la madurez asomó a su puerta, tiene un empleo en una editorial y de nuevo está soltera, tras separarse de Marc Darcy (Colin Firth), con quien se casó.
Las libras de más ya no son problema, la depresión pasó e intenta mantener todo bajo control, incluso tiene un nuevo pretendiente: Jack Qwant (Patrick Dempsey). ¿Qué podría salir mal?
Su vida de un giro cuando se entera de que está embarazada, pero no sabe quién es el padre. ¿Será Daniel o Jack?
Ahora los dos hombres se disputan la paternidad del hijo de Bridget Jones.
Retoques y más retoques
En los últimos años, la actriz Renée Zellweger se ha sometido al bisturí, el cual hizo desparecer su rostro redondo con el que protagonizó las primeras entregas de las películas de Bridget Jones.
En el 2014 apareció con las facciones cambiadas, rejuvenecida y con un cuerpo escultural. El cambio afectó también a la regordeta Jones, ya que en esta tercera entrega se ve obligada a explicar, al comienzo de la cinta, que “por fin” ha logrado “su peso”, para justificar el revuelo de miradas que provoca mientras camina por la calle.
La actriz fue fuertemente criticada por los cambios a su cuerpo que casi la transformaron en otra persona. El propio Hugh Grant, su compañero de reparto, llegó a decir en una ocasión que no la reconoció.
Debido a los señalamientos, Zellweger había prometido que no aparecería en público hasta el estreno de Bridget Jones’ Baby.
