Escenario

Ni siquiera parpadean

Hacer reír a las personas, principalmente a los niños, es lo que emociona cada día a Faby Ramírez, quien practica el arte de las estatuas humanas, en el Paseo de la Sexta, zona 1, y con otros artistas formaron la agrupación Ixmukané Estatuas Humanas.

Wagner Morales concluyó sus estudios de diversificado gracias a esta profesión. (Foto Prensa Libre: Ángel Elías)

Wagner Morales concluyó sus estudios de diversificado gracias a esta profesión. (Foto Prensa Libre: Ángel Elías)

Quienes han visitado el Paseo, en el Centro Histórico capitalino, es probable que hayan visto a Ramírez, pero no todos conocen su historia. En febrero de este año, la actriz buscaba un trabajo que le permitiera ganar dinero, pero que le diera suficiente tiempo para dedicarse al teatro. Fue así como decidió ser una estatua humana.

“Mientras yo actuaba, una amiga cuidada a mi hijo, pero a ella también le llamó la atención esta actividad y creamos otro personaje”, explica Ramírez.

Conforme pasó el tiempo, más individuos se interesaron en la profesión y formaron un colectivo profesional, con misión, visión y objetivos, a fin de tener más proyección. En la actualidad el grupo está integrado por ocho artistas. “Nosotros tomamos esto como un trabajo formal. Tenemos un horario, nos capacitamos, creamos nuevos personajes y permitimos que más personas se unan”, refiere el actor y director Jorge Baq.

Dedicarse a crear estatuas humanas no es fácil. Se requiere tener buen control del cuerpo, por lo cual todos se entrenan en actuación, baile, taichi o yoga. Al vestuario que utilizan le ponen un barniz y luego spray dorado o plateado. Para el maquillaje utilizan una pintura especial que ellos elaboran.

Historia

Se cree que este arte surgió en la Grecia clásica, cuando algunos ciudadanos se disfrazaban para espiar a sus enemigos. “Al país vino por influencia de Españal”, afirma Wagner Morales, integrante del grupo, quien agrega que el público les demuestra admiración. Por ejemplo, recuerda cuando un día pasó un señor con su hijo de 3 años a quien le dijo: “Mirá el trabajo de las estatuas, ellos se ganan la vida con su arte”. “Eso me marcó y me dio fuerzas para continuar”, expresóÉrick Ramírez.

Para contactar a Ixmukané, llamar al 4318-0412, o escribir al correo electrónico ixmukane.estatuas@gmail.com.

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