Escenario

Último poeta maldito se despide

El poeta español Leopoldo María Panero murió ayer, a los 65 años, en Las Palmas de Gran Canaria.

Panero es el último de la generación de los poetas malditos —Auguste Villiers de L’Isle-Adam, Marceline Desbordes-Valmore, Tristan Corbière, entre otros—, término que se generalizó en la década de 1960 para referirse a poetas que, independientemente de su talento, eran sus contemporáneos. También lo caracterizó su poesía atormentada.

El escritor nació el 16 de junio de 1948. Los poemas de Panero le valieron ser incluido en la antología de poesía Nueve novísimos, del crítico literario catalán José María Castellet, que reunió la obra de poetas que consideraba los más renovadores de la década de 1960. En los siguientes años el poeta publicó las obras Teoría, El que no ve y El último hombre.

Durante su vida pasó por varios psiquiátricos, lo cual no le impidió seguir con su labor de escritor hasta hace apenas unos años, ya que en el 2007 publicó el relato Papá, dame la mano que tengo miedo.

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