La milenaria urbe tiene al menos siete kilómetros de túneles, lugares de culto y galerías de escape. y es vista como un gran regalo para la citada región de Anatolia central, una gran atracción turística no solo por su espectacular paisaje.
Cuenta con once niveles de profundidad, 600 entradas y numerosos túneles que la conectan con el exterior, así como lugares para dormir, establos para el ganado, pozos, tanques de agua, cocinas, canales de ventilación, salas comunales, baños y tumbas.
La provincia de Nevsehir es ya famosa por otra ciudad subterránea, Derinkuyu, donde se calcula que un día residieron unas 20 mil personas.