– Agua tibia
– Jabón líquido para platos
– Trapos
– Bicarbonato
– Cloro
– Toalla para secar
Pasos
– Quita toda la comida, bebidas o contenido que pueda estar dentro de la hielera. Vacía todo el líquido.
– Limpia toda la hielera con agua tibia, jabón líquido para platos y uno de los trapos. Esto removerá la suciedad y las manchas superficiales. Enjuaga el trapo en agua y pásalo en la hielera nuevamente para remover el jabón.
– En un tazón, combina partes iguales de bicarbonato y agua para crear una pasta. Aplica con un trapo la pasta en las manchas que aún queden y déjala reposar por 15 minutos. Enjuaga la hielera para quitar la pasta y límpiala con un trapo seco.
– Si la hielera presenta un olor muy fuerte impregnado, combina 9 partes de agua por 1 de cloro. Moja un trapo en esta solución y pásalo por el interior de la hielera para eliminar los malos olores.
– Pasa un trapo limpio y húmedo por toda la hielera para quitar el cloro y sécala por completo antes de guardarla. Al almacenarla, deja el orificio de drenaje abierto para permitir que circule el aire.
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