“Yo soy mexicano y los colores están presentes en mí. Nueva York es una ciudad muy oscura (en el invierno) y hay que darle color“, señaló Galindo.
Esta colección es una verdadera fiesta de color en la que Galindo llevó un arcoíris a la pasarela del Lincoln Center con tonos de verde, azul, rosa, naranja, morado o amarillo, algunos en degrades, sin olvidar el siempre elegante negro, así como los estampados propios de la primavera-verano.
Galindo, que ha estado en el mercado de la moda durante 22 años, presentó una variedad de opciones para la mujer, con sensuales y ceñidos vestidos que definen la figura, la mayoría hasta la rodilla, otros de vuelo amplio, piezas que mostraban los hombros o escotes a la espalda, todos caracterizados por la comodidad y la elegancia.
“La colección está dirigida a una mujer de negocios, que se va del trabajo a un cóctel. Son piezas que se pueden usar de día y de noche“, dijo Galindo, que este año, y por primera vez, está presentando dos colecciones, la “Czar” en la pasarela oficial y la colección César Galindo fuera del circuito oficial.