Esta variedad en las tendencias se da ya que, según los expertos, ahora se opta por hacer vestidos y prendas personalizadas, guiadas por factores de la época.
Por ejemplo, las modelos en una pasarela ahora son vestidas personalmente por el diseñador desde su particular punto de vista. Los estilos no están estancados y se puede ver una evolución en los gustos.
El internet ha ayudado bastante a que ocurra esto. Los compradores ven los nuevos estilos más o menos al mismo tiempo que los editores sentados en primera fila en los desfiles, así que la moda se ha democratizado.
Las tiendas tienen un espacio mucho mayor para vender en sus sitios de internet así que no tienen que elegir entre pantalones anchos o entallados. Y los consumidores no tienen que esperar a que la ropa llegue unas pocas veces al año, hay un flujo constante de nuevas prendas y modelos que se ponen en rebaja.
Para el 2013 se puede pronosticar que los consumidores se enfoquen en un panorama general y no solo en la idea tras una pasarela. Tendrán más opciones de evaluar con qué ropa se ven bien, no como algo de moda, sino como algo propio de su personalidad.