Es importante utilizar limpiadores para el rostro de acuerdo con cada tipo de piel —seca, grasosa o mixta—, en la mañana y en la noche. También conviene exfoliar el cutis para eliminar todas las células muertas.
El empleo de cremas con factores de protección solar es indispensable para evitar resequedad. Estas deben estar enriquecidas con vitaminas, especialmente la C, colágeno y retinol, los cuales harán que la piel se torne más sedosa. Antes de adquirir un producto hay que ver la fecha de caducidad, para evitar efectos contraproducentes.