Los investigadores, entre ellos grupos que luchan contra el consumo de sal y médicos de hospitales londinenses, subrayaron la importancia de que la disminución de la sal ayudase también al descenso en los casos de pacientes con alta tensión arterial.
Se estima que las muertes por enfermedades cardiovasculares descendieron a la mitad desde el año 1971, al caer de 335 mil a 161 mil en 2012, añade el estudio, centrado en Inglaterra.
Entre 2003 y 2011 el índice de mortalidad por derrames cerebrales descendió de 134 casos a 78 (un 42 por ciento) por cada 100 mil habitantes, y en el caso de los ataques cardíacos la cifra pasó de 232 a 139 (40 por ciento) por cada 100 mil personas.
El estudio añade que el consumo de sal descendió de 9.5 gramos al día a 8.1 gramos (15 por ciento) diarios entre 2003 y 2011, debido sobre todo a los esfuerzos de la Agencia de Niveles de Alimentación (FSA, siglas en inglés) para convencer a los fabricantes de alimentos que reduzcan el contenido de sal en las comidas preparadas.
El experto Graham MacGregor, del Hospital Universitario Queen Mary de Londres, destacó el trabajo de la FSA para que se consiguiese esta reducción del consumo de sal.