Causas
Las hemorroides se desarrollan debido al aumento de la presión en el piso pélvico la cual generalmente es consecuencia de pujar muy fuerte al defecar y de sentarse durante períodos largos. Puede también ser producto del estreñimiento crónico, de la diarrea, de la obesidad o del embarazo, opina Pemberton.
Las externas se forman en un período de tres o cuatro días para luego desaparecer lentamente.
Prevención
Hay varios cambios en el estilo de vida con los que las personas pueden intentar para evitar el aparecimiento de hemorroides.
Este incluye hacer ejercicio regularmente, consumir una alimentación sana con alto contenido de fibra —mejora la motilidad intestinal—, beber mucha cantidad de líquido y evitar sentarse durante períodos prolongados.
Tratamiento
Pemberton explica que cuando aparecen hemorroides externas, las medidas de autocuidado normalmente logran aliviar las molestias.
“Las cremas, los ungüentos, los supositorios o las compresas de venta libre y creadas para tratar las hemorroides contienen ingredientes como hidrocortisona que pueden reducir el dolor y la comezón. Esos productos suelen ser eficaces, pero no deben usarse durante más de una semana a la vez. Cuando se usan muy a menudo, pueden producir efectos secundarios, tales como sarpullido en la piel, inflamación o afinamiento de la piel”, añade el especialista.
Remojarse en un baño tibio o en un baño de asiento colocado en el escusado con agua simple durante 10 o 15 minutos, dos o tres veces al día, puede reducir la hinchazón de las hemorroides.
Aplicar hielo o compresas heladas también puede aliviar la hinchazón y el dolor. Los analgésicos como el ibuprofeno, la aspirina o el acetaminofén, igualmente pueden ayudar a aliviar algunas molestias.
Cuando las hemorroides duran más de una semana, pese a los remedios caseros, o provocan dolor y molestia, entonces es momento de hacer una cita con el médico, o bien, si se si tiene un sangrado doloroso por el recto para que el profesional pueda descartar otras afecciones más graves, enfatiza Pemberton.
Si los síntomas se deben a las hemorroides, el médico puede recomendarle extirparlas quirúrgicamente.
A fin de lograrlo, se pueden aplicar varias técnicas, que en su mayoría son factibles de ejecutar en el consultorio médico y no requieren internarse por varios días en un hospital.
¿Qué son?
Las hemorroides son muy comunes. Son el resultado del aumento de presión en el ano. Esto puede ocurrir durante el embarazo, el parto o debido al estreñimiento. La presión provoca que las venas y los tejidos anales se hinchen. Este tejido puede sangrar, a menudo durante las deposiciones.
Las hemorroides pueden ser causadas por Esfuerzo durante las deposiciones, estreñimiento, sentarse durante períodos de tiempo prolongados, especialmente en el baño, algunas enfermedades, como la cirrosis hepática.
Las hemorroides pueden estar dentro o por fuera del cuerpo. Las internas se presentan justo dentro del ano, donde comienza el recto. Cuando son grandes pueden salirse (prolapso). El problema más común con las hemorroides internas es el sangrado durante las deposiciones.
Las externas ocurren por fuera del ano. Pueden causar dificultad para limpiar la zona después de una deposición. Si se forma un coágulo de sangre en una hemorroide externa, puede ser muy doloroso (hemorroide externa trombosada).