Los perros del estudio olfatearon 120 muestras de aliento de personas enfermas y sanas y lograron detectar en el 70% de los casos las que padecían cáncer de pulmón.
Este resultado es tan “esperanzador” que está previsto un nuevo estudio de dos años con muestras de 1.200 personas, indicó Peter Errhalt en una conferencia de prensa.
Los resultados del estudio austriaco coinciden con otras pruebas llevadas a cabo en Estados Unidos y Alemania.
El objetivo a largo plazo es determinar cuales son exactamente los olores que los perros son capaces de detectar, explica Michael Muller, del hospital Otto Wagner de Viena, que colaboró en el estudio.
Si se alcanzara ese objetivo los científicos podrían construir una especie de “nariz electrónica” para diagnosticar cuanto antes el cáncer de pulmón y aumentar así las posibilidades de supervivencia de los pacientes, según Muller.