También es importante acariciarlos suavemente, para que noten el contacto con la piel y se acostumbren a ella como medio de sociabilizarse. Así, no crecerán siendo ni tímidos ni agresivos.
La alimentación es otro de los cuidados principales que se debe tener el gato recién nacido. Es vital que se alimente siempre a la misma hora y en el mismo lugar y que le demos comida a temperatura ambiente.
Cuando los cachorros cumplan un mes ya se pueden alimentar con comida sólida y enseñarles a usar la bandeja de deposiciones. A partir de los dos meses de edad ya se puede visitar al veterinario para iniciar un calendario de vacunaciones que deberá renovarse anualmente.
Extraído: http://mascotass.com/