Por ejemplo, se pueden aprovechar los paseos diarios del gato y distribuir cuencos con agua por los distintos lugares que regularmente visita, aconseja la asociación alemana de artículos para mascotas Heimtierbedarf.
De este modo, el gato podrá sorber un poco de agua aquí y allá a su paso.
Se debe prestar atención, sin embargo, a que, a diferencia de los comederos, es importante mantener los bebederos abastecidos.
También hay diferencias de opinión sobre el sabor del agua. A algunos gatos les gusta recién sacada del grifo, a otros más bien añeja. Es necesario un poco de ensayo y error para averiguar las preferencias de cada mascota.
El bebedero debe limpiarse siempre con regularidad para evitar enfermedades.
Además, para darle más atractivo a la bebida, se le puede ofrecer caldo de pollo al gato.
La asesora en comportamiento felino Birgit Rödder dice que hay que probar un poco para hallar el cuenco adecuado. Algunos gatos prefieren un vaso pequeño, otros un cuenco más grande. Los gatos también tienen sus preferencias en cuanto al material y la altura del bebedero.
Una sugerencia es apelar a algún juego que refresque para animar a la mascota a beber, por ejemplo en los días calurosos. Basta con llenar un recipiente con agua y algunos juguetes.
A algunos gatos curiosos también les gusta jugar con cubitos de hielo. Sin embargo, el agua no debe estar demasiado fría para beber.