“La enuresis se define como el hecho de que los niños persisten orinándose en la noche y/o el día en la ropa, después de una edad de haber alcanzado el control de la vejiga”, explica el médico pediatra Hans Forkel, quien participó el jueves último en el programa en línea El Consultorio que se transmite por www.prensalibre.com
Según indicó el especialista, existen dos tipos de enuresis: la primaria —explicada anteriormente— y la secundaria —cuando hay control de la vejiga, pero la micción involuntaria se da después de seis meses de que el niño ya tenía ese control—.
“El 90 por ciento de los casos es en las noches; es decir, la enuresis nocturna, y afecta más a los varones”, agrega Forkel.
FUNDAMENTAL
La buena noticia para los padres de familia es que la enuresis tiene solución, y esta depende completamente de la comprensión que tengan con su hijo ya que eso reducirá la ansiedad que ellos puedan tener.
El pediatra Hans Forkel, durante su participación en El Consultorio. (Foto Prensa Libre: Brenda Martínez)
“Existen varios tratamientos, pero el principal, el que resuelve casi el cien por cien de los casos, tiene que ver con un cambio de actitud en los niños, y para esto los padres deben tener paciencia, no humillarlos ni castigarlos cuando se orinan”, explicó el pediatra. En muchos hogares es común regañar al pequeño si no va al baño tal y como se le enseñó, incluso si este apenas tiene 2 años, y esto no es adecuado.
“El estrés y las emociones fuertes tienen una alta influencia en el desarrollo de la enuresis, por lo que los papás no deben ponerle una carga al niño para que controle la micción, en especial si aún no tiene 5 años. No se recomienda que le enseñen a ir al baño antes de los 2 años”, comenta Forkel.
Además, los padres no deben sentirse frustrados si sus hijos pasan por este problema, y deben saber exigirle a los pequeños lo que ellos saben que puede dar. Con una visita al médico, con amor y paciencia, esos problemas con el tiempo quedarán atrás.
LAS CAUSAS
Existe un factor genético muy fuerte que puede hacer a un niño propenso a padecer enuresis.
Se ha demostrado que si un padre tuvo enuresis, hay un 44 por ciento de probabilidades de que la desarrolle su hijo; si ambos padres la padecieron, esta se incrementa hasta en un 77 por ciento. Hay otros factores como alteraciones hormonales, neurológicas o de sueño o infecciones que pueden causar este problema, por lo que es sumamente importante acudir con un médico, quien hará al diagnóstico adecuado.
Los problemas de micción nocturna afectan más a los varones. (Foto Prensa Libre: tomada de lithium.com)
CÓMO TRATARLA
Algunas maneras de cómo solucionar este problema, según el pediatra Hans Forkel.
La base es el tratamiento actitudinal, enfocado en que el niño aprenda a reconocer cuando la vejiga está llena, a tener una contracción voluntaria del esfínter, lograr inhibición del reflejo de contracción de la vejiga y tener un buen desarrollo de esta. Los padres deben premiar al menor a medida que él vaya aprendiendo y mejorando, y nunca castigarlo ni humillarlo.
Se sugiere pedirle al pequeño que orine antes de dormir, para disminuir la cantidad de orina que produce.
Hay otras soluciones farmacológicas, pero estas tienen mucho menos probabilidad de éxito que el cambio de actitud y el aprendizaje.