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¿Cuál es el producto adecuado para cada peinado? Recomendaciones y consejos que seguir

Rizos definidos, pelo de erizo o tal vez un voluminoso corte recto: para cada peinado hay productos y utensilios de peluquería adecuados.

¿Cómo encontrar el producto adecuado para cada peinado? Recomendaciones y conejos que seguir

Las espumas dan fijación y volumen al peinado. Son fáciles de aplicar con un peine o un cepillo. (Foto Prensa Libre: Christin Klose/dpa)

Una vez que se haya aprendido qué herramienta de peinado se adapta al propio cabello y al look que se quiere, no solo se ahorrará tiempo frente al espejo, sino que también se podrán evitar en la medida de lo posible esos días en los que el pelo está hecho un “desastre”.

A continuación, presentaremos los productos de peluquería más comunes y explicaremos cuáles son los más adecuados para tener en el cuarto de baño.

Acondicionador: ¿Sí o no?

El champú, el acondicionador y las mascarillas son la mejor forma de preparar el cabello para un buen peinado.

“Nunca debe frotarse el champú en los largos. A su vez, la ampolla de reparación capilar nutre, pero no cierra la cutícula, para eso está el acondicionador”, aconseja el peluquero y director creativo alemán Sascha Rohn.

Por lo tanto, el orden correcto antes del peinado es: champú, mascarilla y acondicionador. Sin embargo, se recomienda precaución en el caso de los peinados voluminosos, ya que el acondicionador puede apelmazar el pelo. Si se quiere mucho volumen, es mejor no ponerse acondicionador.

Para una fijación firme: ¿laca o spray fijador?

Si el peinado debe permanecer fijado durante todo el día, la laca puede ser la elección correcta. Tiene un efecto reafirmante y es mucho más fuerte que el spray fijador. El cabello ya no cae suelto, sino que se vuelve casi rígido. Hay que tener en cuenta que los restos de laca no se eliminan tan fácilmente con el cepillado.

“Los peinados o recogidos cortos pueden fijarse al final con laca”, aconseja el peluquero Antonio Weinitschke, de la Asociación de Peluquerías Alemana. Agrega que es el método adecuado si no se quiere dejar ningún mechón al azar.

“Los sprays tienen un proceso de pulverización más seco y suelen ser más fáciles de quitar”, afirma Weinitschke.

Los sprays son especialmente adecuados para el pelo largo, ya que no lo apelmazan y pueden dar al peinado un movimiento adicional. Sin embargo, existen variantes de ambos productos para distintos grados de fijación, según lo que se desee.

Pomadas para un brillo intenso

Suena a nostalgia, como Elvis o Marlon Brando, pero las pomadas también se adaptan a los looks modernos.

“Las pomadas son productos para un look húmedo y desgreñado que debe poder volver a modelarse”, señala Sascha Rohn. Por eso son ideales, por ejemplo, para peinados con raya al costado o coletas a efectos de fijar el pelo a la cabeza.

Dicho sé de paso, las pomadas ultrafinas para pulverizar se llaman Air Pomade (pomadas de aire) o Pomade Spray Wax (pomadas de cera).  Crean un look ligero y no graso y son especialmente adecuadas para un “peinado suave”, según el portal germano especializado “Haut.de”. Al mismo tiempo, aportan definición y brillo.

Las pomadas en spray pueden utilizarse sobre el cabello húmedo o seco. Se pulveriza la cantidad deseada, sobre todo el cabello o sobre mechones individuales y se esparce con los dedos.

Fijación y volumen: espuma

Como su nombre indica, este producto está pensado para fortalecer, dar fijación, volumen y forma al cabello.

Existen espumas modeladoras para cabellos finos, teñidos, secos y que requieren mucho mantenimiento. “Haut.de” recomienda que si se quiere crear un peinado extremo es conveniente optar por productos que proporcionen una fijación de fuerte a extrafuerte.

Para peinar con secador o alisar el cabello son útiles los productos con fórmulas de protección térmica y principios activos hidratantes. Protegen el cabello de los daños causados por el calor y la deshidratación.

Para facilitar la aplicación, se pueden utilizar peines o cepillos para distribuir la espuma por el cabello húmedo.

Tendencia retro: gel para peinar

Los años 90 están de moda y con ellos, el gel fijador también celebra su regreso. Las gominas son perfectas para crear peinados lisos y brillantes o recogidos con puntas. Este producto suele tener una consistencia húmeda y se endurece rápidamente en el pelo.

Sin embargo, existen distintos tipos de geles. Los llamados geles extremos, con sustancias fijadoras como extractos de caucho, son muy adecuados para cortes de pelo geométricos. Los geles para rizos, como su nombre indica, definen rizos y ondas y, al mismo tiempo, protegen el peinado de la humedad.

Dependiendo del largo del pelo y del peinado deseado, el gel se aplica sobre el cabello seco o húmedo y después se da forma al peinado.

¿Cómo encontrar el producto adecuado para cada peinado? Recomendaciones y conejos que seguir
Para peinados elaborados, hay que saber cómo fijarlos para que duren todo el día. (Foto Prensa Libre): Ina Fassbender/dpa

Sin embargo, la mayoría de los productos en gel contienen alcohol y resecan el cabello. Por eso es aconsejable utilizar una crema hidratante intensiva al lavarse el pelo.

Para una fijación ligera: leche para peinar (Styling-Milk)

Al igual que el gel, la leche para peinar también crea efectos brillantes. Sin embargo, su fijación es menor, por lo que no es adecuada para rizos muy marcados.

“Lleva en el mercado unos 15 años. Es un producto bastante joven, por así decirlo, que favorece de forma óptima el look natural de hoy en día”, comenta Sascha Rohn.

La leche de peinado fija los mechones de pelo, pero sigue siendo flexible. A diferencia de la gomina, es un producto más nutritivo que hidrata el cabello.

En resumen, un producto fijador fuerte suele ser adecuado para el cabello fino, uno más ligero para el fuerte.

“El pelo corto y looks con aspecto texturizado deben peinarse con gomina o cera. Para cabellos más largos, son más adecuadas las cremas más suaves”, recomienda el peluquero Weinitschke.

 

 

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