“Los niños aprenden rápido y los padres deben prepararse para darles respuesta a sus dudas”, agrega. Cerca de los 7 años, los menores descubren su cuerpo, por lo que es el momento oportuno para explicarles su funcionamiento.
Si el padre se siente con ánimo, se puede apoyar en dibujos y empezar a hablarle a su hijo sobre el cuerpo humano y el aparato reproductor, y más adelante, según las preguntas que haga, entrar en detalle y explicar con claridad y sensibilidad. Es importante contestar todas sus interrogantes, porque si no se hace, buscará a alguien más, y nunca será mejor que el padre o la madre.