Hay reportes en varias partes del mundo del uso de legumbres, raíces, flores, hojas, extractos y aceites con este fin. Incluso en la medicina moderna, varios de los medicamentos que utilizamos de forma cotidiana para tratar la diabetes tiene un origen farmacológico a partir de plantas. Por ejemplo; la metformina es un derivado molecular de la galegina que se extrae de la galega officinalis (Ruda cabruna); las gliflozinas (canagliflozina, dapagliflozina o empagliflozina) que son unos de los mejores medicamentos antidiabéticos en la actualidad, son derivados moleculares de la florizina, glucósido que se extrae de la corteza de los árboles de manzana.
Desde el campo de la herbolaria se han atribuido a varias plantas beneficios en el control de pacientes con diabetes. Destacan entre todas: trigonella foenum-graecum (fenogrego), momordica charantia (melón amargo), silybum marianum (cardo mariano); estos cuentan con múltiples ensayos clínicos en pacientes diabéticos en los que han demostrado que ayudan a reducir los niveles de glucosa en sangre en ayunas y después de las comidas, así como disminuir los niveles de hemoglobina glicosilada.
Otras plantas han mostrado beneficios antidiabéticos, lastimosamente cuentan con mucho menos estudios y por ende, la evidencia es menor. Aegle marmelos, allium cepa (cebolla roja), gymnema sylvestre, nigella sativa (semilla negra), ocimum sanctum (albahaca morada), panax quinquefolius (gingseng americano) y salacia reticulate por mencionar algunas.
¿Qué nos detiene a utilizar opciones naturales en nuestros consultorios? Aunque ya cuentan con varios estudios, muchos tienen errores metodológicos o insuficiente cantidad de pacientes que nos impide generalizar estos resultados; además, nos falta mucha información en cuanto a su seguridad. Muchas de las plantas que mencionamos generan molestias gastrointestinales, algunas pueden causar daños severos en el hígado o riñones y varias se han asociado a abortos. Nos falta bastante por conocer sobre sus efectos deletéreos en el organismo cuando se toman de forma prolongada.
Puntos a tomar en cuenta:
– No porque sean medicamentos naturales significa que son inofensivos. Antes de consumir un producto natural con fines medicinales, infórmese sobre sus efectos adversos y, platique con su médico acerca de los beneficios, riesgos e interacciones con otros medicamentos.
– Las plantas también tienen formas correctas para consumirlas. Infórmese si se debe utilizar las semillas, las hojas, los frutos o algún extracto en particular; tomar en cuenta también las dosis recomendadas. Aunque existen profesionales que se dedican a la herbolaria en Guatemala; la mayoría de “médicos naturistas” ni son médicos ni cuentan con la formación adecuada. Desconfíe de preparados en cápsulas, pastillas o aceites que no cumplan con todas las normas y registros sanitarios.
– En ningún caso estas plantas reemplazan a los medicamentos recetados por su médico, ni sustituyen los cuidados en la alimentación, ejercicio y control de peso que todo paciente con diabetes debe tener.
Medicina natural
Dr. César Rodolfo Caballeros Barragán Médico Endocrinólogo, Socio Activo de la Asociación Guatemalteca de Endocrinología, Metabolismo y Nutrición
No existe cura para la diabetes. Si alguien le ofrece una medicina natural que lo curará de forma definitiva, lo están engañando.