El estudio se publicó en la revista Journal of the American Medical Asociation, y lo dirigió Sven Cnattingius, del Instituto Karolinska en Estocolomo, Suecia.
“Éste es un estudio único que nos permitió observar la relación entre la obesidad o exceso de peso de la mamá al momento de empezar la gestación y el riesgo de tener nacimiento pre término” , dijo Villamor.
“Las conclusiones permiten asociar la obesidad con un aumento en el riesgo de nacimientos pre término, y esta vinculación es especialmente fuerte con los nacimientos pre término clasificados como extremadamente prematuros”, añadió. “Esto es los nacimientos entre las semanas veintidós y veintisiete de la gestación” .
Los infantes nacidos prematuros y, sobre todo los que son extremadamente prematuros, representan una fracción sustancial de la mortalidad y la morbilidad infantiles en los países con ingresos altos.
La investigación mostró que a medida que aumenta el índice de masa corporal, también aumenta la probabilidad de un parto prematuro, en comparación con los nacimientos en mujeres de peso normal. Entre las mujeres con un IMC que las colocaba en los grados 2 y 3 de obesidad, las probabilidades de partos extremadamente prematuros aumentan al doble.