El novedoso producto de Google, que aún no está a disposición del público general, permite a sus usuarios acceder a muchas de las utilidades de los teléfonos inteligentes directamente en las gafas, que incorporan una cámara que permite tomar fotos y vídeos, entre otras cosas.
“Estamos haciendo una prueba de campo de esa tecnología en una variedad de circunstancias, viendo dónde puede ser más útil, más beneficiosa”, declaró Bratton.
La experiencia es similar a la iniciada por otros cuerpos policiales, como la Dirección General de la Policía española, que está también explorando el uso de las Google Glass en las patrullas, con el fin de incrementar la seguridad y la eficacia en las intervenciones de los agentes.