“El G Flex tiene una curva parecida a la forma del rostro. La idea es que al hablar, la bocina esté más cerca del oído y el micrófono más cerca de la boca. Por eso también el tamaño es de seis pulgadas”, explicó Julio Osorio, de LG Electronics.
El monitor curvo también ayuda a que el contenido multimedia se visualice mejor, gracias al ángulo que proporciona el diseño.
Otro de los aspectos atractivos es su carcasa fabricada con polímero, un material que elimina cualquier rayón leve en menos de 25 minutos. “Cuando pasa este tipo de percances, solo se rompe la estructura del polímero, pero la memoria interna del material hace que vuelva a su apariencia original”, comentó Osorio.
La pantalla integra tecnología Gorilla 3, que permite mayor flexibilidad para evitar que el dispositivo se quiebre al tener demasiado peso encima. “El móvil soporta hasta 70 libras. La memoria del polímero hace que vuelva a tomar la forma curva”, aseguró Osorio.
La calidad de las imágenes captadas por su cámara también está asegurada, ya que tiene un estabilizador óptico que evita fotografías desenfocadas o borrosas. La cámara delantera es de 13 MP y la trasera de 2 MP; ambas toman video en alta resolución. Además, el botón trasero del teléfono permite captar imágenes con una sola mano.
Aunque muchas características del G Flex son parecidas a su antecesor, el G2, el primero se distingue por estar enfocado al ámbito multimedia, mientras que el segundo —de 5.2 pulgadas— está diseñado para funciones ejecutivas.