Con 10 salas diferentes, el visitante recorre recintos temáticos y que cuentan la historia de las familias de antaño. “Cada uno de los ambientes es diferente, pero decidimos mantener el estado original de la casa, entonces el museo tiene objetos originales y que pertenecieron a la familia”, explica Quevedo.

Muñecas del siglo pasado se pueden apreciar en el lugar.

Casa Mima recibe este nombre por Berta Escobar, abuela de Quevedo, a quien de cariño le llamaban abuela Mima “Es particular su historia, pero esta casa fue construida a mediados del siglo XIX y la adquirió la familia en 1920. Perteneció a don Ricardo Escobar y doña Mercedes Fernández de Escobar. En 1963 la heredó su hija mayor, Berta Escobar, a quien le decíamos Mima. Uno de sus deseos antes de morir era que no se vendiera; por esa razón se decidió transformarla en un museo que ahora puede visitar cualquier apasionado por la historia”, agrega.

La fecha del aniversario de este museo es el 10 de noviembre. “Se escogió este día porque es el cumpleaños de Berta Escobar”, indica Quevedo.

En sus distintos ambientes se puede recrear la vida de los habitantes de la Nueva Guatemala de la Asunción. Casa Mima tiene la particularidad de evocar recuerdos en sus invitados. “Siempre vienen personas que nos dicen que alguna parte de la casa les trae buenos recuerdos, que la casa de sus padres o abuelos era idéntica. Eso nos complace y nos motiva a seguir con el trabajo que hacemos”, dice Quevedo.

Todos los  años se exhiben  nacimientos  del país y de diversas regiones del mundo.