“Nosotros no tenemos nada que perder en esta eliminatoria y eso nos libera de presión. El rival, en cambio, va a tener que decidir si encerrarse o atacar, mientras que nosotros sólo tenemos una opción: atacar, atacar y, cuando nos relajemos, seguir atacando”, añadió el técnico español del Barcelona.

Después de que los suyos remontaran en octavos el 4-0 ante el Paris Saint-Germain (PSG) con un 6-1 en el Camp Nou, el técnico español del Barcelona estableció en cinco el objetivo goleador de su equipo y alentó a la hinchada azulgrana a que no se pierda otra “noche especial”.

“Estamos en circunstancias parecidas a las de París, pero esta vez necesitamos menos goles, sólo tres, pero teniendo en cuenta que el rival va a tener opciones y puede marcar uno, nuestro objetivo es hacer cinco”, expuso Luis Enrique.

“Y lo que le digo a la gente es que no se vaya en el 80', que se va a perder algo, porque nosotros lo vamos a intentar hasta el final.  Tienen otra oportunidad de vivir otra noche histórica, y ya se vio que el Barça puede hacer tres goles en tres minutos, así que, hasta el 95', todos juntos”, prosiguió el entrenador azulgrana.
Luis Enrique no quiso hablar de milagro, tampoco de la necesidad de hacer “un partido perfecto”, sí de “controlar las emociones” de sus jugadores, de “ser muy efectivos”, de “generar ocasiones” a la Juve, de “crearle dudas” y de “minimizar al máximo” su potencial.

“Todo lo que ha hecho este equipo recientemente y en estos años invita al optimismo y a la afición le digo que acuda y que anime y cree un ambiente de locura deportiva en el que nuestros jugadores puedan dar su mejor versión”, concluyó el técnico del Barcelona.